02-11-2024 05:26 AM Tiempo de Jerusalén

Obama logra bloquear proyecto de nuevas sanciones contra Irán en el Senado

Obama logra bloquear proyecto de nuevas sanciones contra Ir&aacuten en el Senado

En lo que parece ser una clara victoria del presidente estadounidense, un gran esfuerzo realizado por el lobby pro-israelí, para aprobar una nueva ley de sanciones contra Irán parece haber quedado bloqueado en el Senado de EEUU.

En lo que parece ser una clara victoria del presidente estadounidense Barack Obama, un gran esfuerzo realizado por el lobby pro-israelí y su principal organización, el Comité de Asuntos Públicos Americano-Israelí (AIPAC) para aprobar una nueva ley de sanciones contra Irán parece haber quedado bloqueado en el Senado de EEUU.

Aunque la legislación denominada “Acta sobre un Irán Libre de Armas Nucleares 2013” había logrado la pasada semana 59 co-patrocinadores en el Senado de EEUU, que cuenta 100 escaños, lo cierto es que la oposición a la misma entre los demócratas ha crecido en los últimos días. Esta oposición ha llevado al líder de la Mayoría en el Senado, Harry Reid, que controla el calendario y la agenda de las sesiones, a dar marcha atrás con respecto a un previo compromiso de permitir que dicho proyecto fuera sometido a votación en las semanas siguientes. Como resultado, el AIPAC está intentando ahora hacer que sea aprobado por la Cámara de Representantes, dominada por los republicanos.

Los críticos al proyecto señalan que éste busca sabotear y destruir el acuerdo nuclear o Plan de Acción Conjunto, firmado por Irán y el Grupo 5+1 (EEUU; Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania) y cualquier oportunidad de una aproximación entre EEUU e Irán. La resistencia a la aprobación del proyecto entre los demócratas se ha fortalecido en los últimos días y Obama ha declaro claro que vetará la ley si ella llega a su despacho. Uno de los patrocinadores de la ley, el senador Richard Blumenthal, dijo la pasada semana que él no veía la necesidad de una votación “mientras haya progresos” en la implementación del acuerdo del 24 de Noviembre.

Aunque Obama ha prometido utilizar todos los medios necesarios, incluyendo la fuerza militar, para impedir que Irán obtenga una bomba, él no ha ocultado su fuerte deseo de evitar verse atrapado en otra guerra en Oriente Medio, un deseo que es ampliamente compartido por la élite de política exterior y militar estadounidense así como por el público en general, según encuestas de opinión recientes.

Por su parte, Irán ha dicho desde hace mucho tiempo que no tiene intención de construir una bomba, pero también ha insistido en que cualquier acuerdo final debe reconocer su derecho, contenido en el Tratado de No Proliferación (TNP), a enriquecer uranio a niveles necesarios para llevar a cabo un programa nuclear civil.

Mientras la administración estadounidense y las otras potencias del Grupo 5+1 parecen dispuestas a aceptar un acuerdo que permitiría un enriquecimiento de uranio bajo un régimen de inspección reforzado, el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, ha pedido que cualquier acuerdo final desmantele el programa nuclear de Irán, incluyendo las capacidades para el enriquecimiento de uranio. Dado que para Irán tales exigencias son inaceptables, los analistas ven esta postura de Netanyahu como un intento de hacer fracasar el conjunto de las negociaciones.

Las demandas de Netanyahu están reflejadas en el proyecto de ley que está denominado con el nombre de sus patrocinadores, el senador republicano Mark Kirk y el demócrata Robert Menendez, que recibieron más dinero de para la campaña del AIPAC que cualquier otro competidor electoral en las elecciones de 2010 y 2012 respectivamente, en las que salieron elegidos.

Este proyecto viola el compromiso de EEUU en el acuerdo con Irán de no imponer nuevas sanciones contra ese país durante el período de aplicación del acuerdo. Su aprobación llevaría a la ruptura del Grupo 5+1 y a que los miembros de éste junto con Irán tuvieran justificación para acusar a EEUU de no ser serio en las negociaciones y actuar de mala fe.

El proyecto también pide que se suministre apoyo militar y de otro tipo a Israel si este último “se ve obligado a adoptar una acción militar en legítima defensa contra el programa nuclear de Irán”. Esta provisión ha sido denunciada por la presidenta del Comité de Inteligencia del Senado, Dianne Feinstein, porque “permite a Israel determinar cuando y donde EEUU va a la guerra”. Ella dijo en un discurso el pasado lunes que el proyecto de ley “facilita la marcha hacia la guerra”. Todas estas provisiones dan credibilidad a la administración cuando afirma que el principal propósito del proyecto es sabotear el acuerdo del 24 de noviembre.

Feinstein y el presidente del Comité de Servicios Armados del Senado, Carl Levin, se han opuesto a que el proyecto sea sometido a votación.

En los últimos días, otras voces se han alzado en oposición al proyecto. El antiguo consejero de seguridad nacional del ex presidente Bill Clinton, Sandy Berger, advirtió que una votación sobre el mismo ahora planteaba “el riesgo de hacer descarrillar las negociaciones antes de que comiencen”. Por su parte, el ex secretario de Defensa, Bob Gates, advirtió que aprobar las sanciones sería “un terrible error”.

Los grandes periódicos estadounidenses, incluyendo el New York Times, Los Angeles Times, el Washington Post y el Washington Post, han publicado asimismo editoriales contra el proyecto de ley en los últimos días.

Jim Lobe - www.lobelog.com