Brasil ha señalado que vigilará el cumplimiento de las promesas de EEUU de detener las actividades de espionaje sobre los países amigos de EEUU.
Brasil ha señalado que “vigilará” el cumplimiento de las promesas de EEUU de detener las actividades de espionaje sobre los países amigos de EEUU.
Esto se produjo poco después de que el presidente de EEUU, Barack Obama, cambiara las prácticas de espionaje durante un discurso pronunciado el pasado viernes. Estos cambios no han logrado, sin embargo, satisfacer a los grupos pro-derechos humanos y defensores de la intimidad ni a los ciudadanos estadounidenses ordinarios.
“Se trata de un primer paso. El gobierno brasileño vigilará con extrema atención las ramificaciones prácticas del discurso de Obama”, dijo el portavoz presidencial, Thomas Traumann, el domingo.
Brasil se convirtió en el objetivo de las actividades de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional de EEUU (NSA) en los pasados años. El pasado 1 de septiembre, la cadena O Globo de Brasil dijo que la NSA había espiado los emails, llamadas telefónicas y mensajes de texto de la presidenta de Brasil, Dilma Roussef.
Las revelaciones sobre el espionaje estadounidense contra Brasil se produjeron después de que el ex agente de inteligencia estadounidense, Edward Snowden, filtrara documentos que probaban que la NSA y el FBI estaban llevando a cabo una amplia campaña de espionaje de millones de llamadas telefónicas y datos de Internet incluyendo cuentas y correos electrónicos de Facebook, Yahoo, Google, Apple y Microsoft.
La presidenta Roussef canceló una visita a EEUU en octubre de 2013 después de que se revelara que su teléfono móvil había sido intervenido por el programa de vigilancia estadounidense. La compañía petrolífera estatal Petronas y millones de brasileños fueron también objeto de espionaje.
En octubre del pasado año, Rousseff habló en la Asamblea General de la ONU y pidió regulaciones internacionales sobre la privacidad de datos y la limitación de los programas de espionaje en Internet.
En noviembre de 2013, Brasil y Alemania presentaron formalmente una resolución sobre el espionaje dela NSA al Comité de Derechos Humanos de la Asamblea General de la ONU.
