Los presidentes de los países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) declararon este miércoles la región como una zona de paz.
Los presidentes de los países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) declararon este miércoles la región como una “zona de paz”.
El texto establece que los países de la CELAC declaran a "América Latina y El Caribe como Zona de Paz basada en el respeto de los principios y normas del Derecho Internacional, incluyendo los instrumentos internacionales de los que los Estados miembros son parte, y los Principios y Propósitos de la Carta de las Naciones Unidas".
En la lectura del acta, firmada por los representantes de 33 países presentes en La Habana, quedó claro el “compromiso con la solución pacífica de controversias” en la región y en el mundo para “desterrar para siempre el uso de la fuerza”.
El presidente cubano, Raúl Castro, quien fue el encargado de leer la declaración, destacó el esfuerzo de todas las naciones para “practicar la tolerancia y vivir en paz” y pidió a los representantes de la CELAC guiarse por la mencionada declaración cuando se deban tomar decisiones a nivel internacional.
Los participantes acordaron continuar la promoción del desarme nuclear como “objetivo prioritario” para mantener la paz en la región.
Tal acuerdo resulta trascendental cuando persisten conflictos bilaterales en la región, que en el caso, por ejemplo de Chile y Perú, provocó una decisión de la Corte Internacional de Justicia sobre una disputa territorial.
La cumbre se pronunció en favor del proceso de paz que el gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) negocian desde hace más de un año en La Habana.
Precisamente la insurgencia colombiana había solicitado a CELAC una mayor involucración en apoyo a estas negociaciones.
No intervención y respeto a la soberanía
Acordaron también no intervenir en los asuntos internos de país alguno, en cumplimiento a los principios de soberanía.
Manifestaron su decisión de “respetar el derecho inalienable de cada Estado a elegir su sistema económico, político, social, y cultural como condición esencial para asegurar la convivencia pacífica entre las naciones”.
Los países que conforman la CELAC decidieron “fomentar las relaciones de amistad entre sí” y con otras naciones, a pesar de las múltiples diferencias que puedan existir.
La CELAC reiteró el apoyo a Argentina y su reclamación sobre las islas Malvinas, que están ocupadas en la actualidad por el Reino Unido.
Creación de un foro CELAC-China
Otra de las iniciativas que parece tener luz verde es la creación de un foro CELAC-China, con énfasis en los temas económicos y el papel fundamental que está jugando el gigante asiático en el mundo. Esta resolución supone un desafío a EEUU, que había visto a América Latina como su patio trasero hasta muy recientemente.
En la jornada de clausura, Cuba entregó la presidencia temporal de la CELAC a Costa Rica por medio de la presidenta de ese país centroamericano, Laura Chinchilla.