Recientemente se han dado a conocer los nombres de 21 libaneses muertos en la localidad siria de Zarat y en la ciudadela de Hosn tras haberse unido a las filas de grupos militantes en Siria.
Recientemente se han dado a conocer los nombres de 21 libaneses muertos en la localidad siria de Zarat y en la ciudadela de Hosn (El Crack de los Caballeros) tras haberse unido a las filas de grupos militantes en Siria. Estas informaciones han sembrado inquietud en varias regiones del Norte del Líbano y de la Bekaa.
Los temores han crecido debido a las informaciones según las cuales varios jóvenes libaneses habrían entrado en Siria, en diferentes períodos, atravesando los pasos fronterizos ilegalmente. Ellos proceden de regiones libanesas que han sido colocadas bajo una alta vigilancia por los servicios de seguridad debido a la implantación en ellas de grupos extremistas, algunos de ellos vinculados a Al Qaida.
No es un secreto que el libanés Abu Suleiman (antiguo detenido en la prisión libanesa de Rumié por su pertenencia al grupo extremista Fateh al Islam) ha tomado el mando del Crack de los Caballeros desde hace dos años y numerosos salafistas libaneses se le han unido allí. Un primer intento de un grupo de unirse a las filas de Abu Suleiman, octubre de 2012, terminó en un fracaso cuando sus miembros cayeron en una emboscada del Ejército sirio que costó la vida a casi todos. Desde entonces, las infiltraciones en Siria se han hecho de noche y en pequeños grupos de dos o tres individuos. Hoy en día, el número de libaneses salafistas que luchan desplegados entre la localidad de Zarat y el Crack de los Caballeros está cifrado en varios cientos.
Ahora, sin embargo, la situación de Abu Suleiman y sus unidades ha empeorado debido al bloqueo impuesto por el Ejército y el continuo bombardeo de sus posiciones. Militantes en el lado libanés han intentado llevar a cabo ataques de diversión para aliviar la presión que sufre Abu Suleiman. Ellos han disparado obuses de mortero hacia Siria y han atacado un campamento del Ejército sirio cerca de Gueida, matando a algunos soldados. Sin embargo, la respuesta siria ha sido muy violenta y varios obuses han caído en localidades libanesas donde se hallan atrincherados estos grupos armados. Decenas de cadáveres pudieron ser vistos allí, según testigos.
Fuentes bien informadas prevén una intensificación de la potencia de fuego del Ejército sirio en la región, lo que puede llevar a la muerte de decenas de militantes libanesas desplegados cerca del Crack de los Caballeros.
Fuentes salafistas indican que el número de combatientes libaneses salafistas en Siria ha comenzado a escapar al control de los dignatarios religiosos extremistas y los partidos libaneses que mantienen un discurso incitador sectario.