El gobierno libanés, en el que participan los dos campos rivales del país, anunció el sábado que había adoptado su declaración política después de dos semanas de bloqueo ligado a la espinosa cuestión de
El gobierno libanés, en el que participan los dos campos rivales del país, anunció el sábado que había adoptado su declaración política después de dos semanas de bloqueo ligado a la espinosa cuestión de la resistencia.
Un mes después de su formación, el gobierno del primer ministro Tammam Salam se ha puesto de acuerdo en un texto de compromiso con respecto a la resistencia armada contra el enemigo israelí.
Los ministros de Kataeb (Falange), Seyaan Azzi, Ramzi Yreigue, Alain Hakim, y el ministro de Justicia, Ashraf Rifi, han emitido sus reservas.
La coalición del 14 de Marzo reclamaba que Hezbolá no sea autorizado a reaccionar unilateralmente y que su acción esté condicionada a un aval previo del Estado.
Las dos partes han logrado finalmente un acuerdo sobre un texto que prevee que “en virtud de la responsabilidad del Estado en materia de salvaguardia del Líbano y la unidad de su territorio... el gobierno subraya el deber del Estado de liberar su tierra por todos los medios legítimos”.
El texto subraya “el derecho del Estado a luchar por la liberación de las Granjas de Shebaa, las colinas de Kfar Shuba y la parte libanesa de Gayar mediante el conjunto de medios legítimos”, así como el “derecho de los ciudadanos libaneses a resistir a la ocupación, rechazar las agresiones israelíes y recuperar los territorios ocupados”.
La formula concilia las dos posturas, ya que se habla de la expresión “el deber del Estado” en el texto sin omitir el derecho a la resistencia y se reemplaza la fórmula “el derecho del pueblo libanés a resistir” por “el derecho de los ciudadanos libaneses a resistir”.
En relación a las declaraciones precedentes, este compromiso no confía explícitamente a Hezbolá la resistencia contra el enemigo israelí, pero reconoce el derecho a recurrir a las armas al margen de la autoridad del Estado.
Siempre en el marco de la seguridad del país el texto indica que “el gobierno otorga una excepcional importancia a la lucha contra el terrorismo en todas sus formas y recurrirá a todos los medios de que dispone el Estado para reforzar la capacidad de las fuerzas armadas y de seguridad libanesas para hacerlo. Sin olvidar sus misiones de protección de las fronteras del Líbano”.
En lo que se refiere a las elecciones presidenciales, el texto estima que “el desafío más urgente al que debe hacer frente el gobierno es el de crear las condiciones necesarias para la celebración de las elecciones presidenciales en los plazos previstos dentro del respeto a la Constitución”.
Y añadió: “Además, el gobierno se compromete a adoptar una nueva ley para las elecciones legislativas y cuenta con elaborar un proyecto de ley de descentralización administrativa y transmitirlo al Parlamento para su aprobación”.
El presidente del Parlamento, Nabih Berri, convocó al Parlamento a una sesión plenaria los días 19 y 20 de Marzo con vistas a aprobar la declaración ministerial y dar un voto de confianza al gobierno.
Reacciones del bloque del 8 de Marzo
El ministro de Industria de Hezbolá, Hussein Hayy Hassan, reiteró que “el dossier de la Resistencia es un tema constante, que figura en todas las declaraciones ministeriales.”
“Sin el Ejército, sin el pueblo y, definitivamente, sin la Resistencia no tendríamos nunca libertad, soberanía e independencia”:
Por su parte, el diputado Ali Jreiss, del bloque parlamentario Liberación y Desarrollo (Amal), afirmó que la elaboración de la declaración ministerial representa “un logro muy importante”.
“Hará falta un plan estratégico de seguridad y apoyar a la institución militar para controlar las regiones que conocen situaciones tensas”.
