El Ejército libanés se desplegó el miércoles en Ersal, en la frontera con Siria, reabriendo la principal ruta de acceso a la ciudad después de una noche de tensiones.

El Ejército libanés se desplegó el miércoles en Ersal, en la frontera con Siria, reabriendo la principal ruta de acceso a la ciudad después de una noche de tensiones.

Ersal alberga a numerosos rebeldes sirios que han huido del conflicto en el vecino país y su ruta de acceso ha sido bloqueada en numerosas ocasiones por los habitantes de Labweh en reacción a la caída de cohetes sobre esta localidad vecina situada a algunos kilómetros al oeste.

La pasada semana, una persona resultó muerta en Labweh por cohetes y sus habitantes acusan a los rebeldes sirios refugiados en Ersal de ese ataque. Dos coches bomba interceptados el domingo y el lunes procedían igualmente de Ersal.

El cierre de esta ruta desencadenó la indignación de la Corriente del Futuro y los grupos pro-takfiris del Líbano, que bloquearon calles e incendiaron neumáticos en diversas partes del país el pasado martes, en especial en la capital, Beirut, y en el Valle de la Bekaa para protestar contra lo que denominaban “el asedio” a los habitantes de Ersal.

El Ejército llegó el miércoles al alba a Ersal, donde reabrió la ruta de acceso, según un miembro del consejo municipal de la ciudad, Bakr Huyari, que precisó que “por el momento, la situación está en calma”.

Por su parte, los habitantes de Labweh han saludado la llegada del Ejército en Ersal, según el diputado de Hezbolá Hussein al Hayy, que indicó en el Parlamento que el partido deseaba tal despliegue.

La región fronteriza del Líbano con Siria se ha convertido en inestable debido a la presencia de más de 50.000 refugiados sirios en Ersal.

Berri: hace falta declarar el estado de emergencia en Ersal

Por su parte, el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, ha pedido que sea proclamado el “estado de emergencia” en Ersal.

Berri exhortó al Ejército y a las fuerzas de seguridad a restablecer la calma en Ersal y a impedir que combatientes armados se mantengan en esa ciudad y en sus alrededores. Él también subrayó la necesidad de establecer un plan que sirva para mejorar las condiciones de vida de los habitantes y refugiados sirios.

Berri señaló que los habitantes de Ersal rechazan la utilización de su ciudad como un punto de paso o un santuario por parte de aquellos que toman como objetivo a los pueblos vecinos.