24-11-2024 12:38 PM Tiempo de Jerusalén

Vídeos en Internet dan voz a la reprimida población saudí

Vídeos en Internet dan voz a la reprimida población saudí

Un grupo de jóvenes de diferentes tribus y regiones del país han comenzado a colocar cortos mensajes de video en YouTube en los que ponen de manifiesto sus demandas.

Quizás todo comenzó como una simple coincidencia, pero del mismo modo que un fuego comienza por las chispas más pequeñas las palabras de los oprimidos en el reino saudí podrían alimentar la llama de descontento, que se ha ido acumulando en Arabia Saudí durante décadas.

Ésta es, en esencia, la nueva ola de llamamientos realizados por una nueva generación de personas que pertenecen a diferentes grupos ideológicos y sociales. Ellos ya no se sienten vinculados al concepto de lealtad tribal, que fue promovido por el fundador del reino saudí y sus sucesores.

Hoy en día, ellos han desarrollado un nuevo movimiento popular, que es objeto de observación y análisis. En una nueva, valerosa e interactiva forma de expresar la voz de la mayoría de los jóvenes en el opresivo reino saudí, un grupo de jóvenes de diferentes tribus y regiones del país han comenzado a colocar cortos mensajes de video en YouTube en los que ponen de manifiesto sus demandas.

Los videos están estructurados de una forma similar: un joven activista, identificado con su nombre, hace una declaración ante las cámaras que dura entre 30 segundos y 3 minutos. La breve declaración se dirige directamente al rey Abdulá ib Abdul Aziz y expone los problemas a los que la gente común hace frente, como el desempleo, la pobreza y la falta de viviendas y servicios públicos, sin olvidar los temas socio-políticos, como la libertad de expresión y de reunión.

Una campaña llamada “Los salarios no son suficientes”, que rápidamente se extendió por Twitter, atrajo a numerosos jóvenes, que han estado compartiendo vídeos y mensajes. Algunos periodistas e intelectuales han preferido esperar antes de implicarse y ver lo que ocurre con la campaña.

El 22 de Marzo, un hombre llamado Abdul Aziz bin Fahd al Dusari apareció en los medios durante 33 segundos afirmando cosas que no habían sido dicha públicamente en el reino saudí durante décadas. Dirigiéndose al rey Abdulá directamente, él dijo:

“Soy ciudadano saudí. No gano más que 1.900 riales (506 dólares) al mes. Por Dios, Abdulá bin Abdul Aziz, ¿es esto sucificiente para pagar una vivienda, una dote y un vehículo? Estamos cansados y, sin embargo, tú culpas a los que ponen bombas. ¡Oh hermano! Ayúdanos o acaso deberíamos suplicarte por el dinero del petróleo. Danos aquello con lo que tú y tus descendientes habéis estado jugando. Danos nuestros derechos”.

El vídeo recibió un número de visitas récord desde que fue subido a Internet. El 1 de abril él había sido visto por 1,6 millones de visitantes.

El 23 de Marzo, Abdulá Mabruk bin Uzman al Gamdi, de la ciudad de Bisha, en el suroeste de Arabia Saudí, colocó otro vídeo en el que comentaba el de Dusari. Dirigiéndose también al rey, dijo:

“En base a mi experiencia y observaciones, apoyo lo que el joven Al Dusari dijo en su llamamiento al rey. Pido a todo el mundo que se una de la misma manera a este llamamiento para que nuestra voz pueda llegar al Custodio de las Dos Mezquitas Sagradas y que él conozca la situación, los bajos salarios, la corrupción rampante y la injusticia. No es razonable ni aceptable que una pequeña élite controle los fondos del Estado mientras que el resto de la población pasa hambre y vive en la pobreza. Por esta razón, apoyo lo que dijo este joven”.

Él luego mostró su tarjeta de identidad y pidió a todos que participen en la campaña. El 1 de abril el vídeo alcanzó las 737.167 visitas.

El 27 de Marzo, Saúd Mardi Abdulá al Bidani al Harbi, nacido en Riad, colocó otro vídeo en el que señalaba:

“No empujéis al pueblo a protestar. No nos obliguéis a tomar la calle porque el número de coches de policía es mucho menor que el número de personas libres. Es fácil para nosotros tomar la calle. Pedimos nuestros derechos de una forma pacífica, por supuesto, así que escuchad nuestras voces. Has hablado con los judíos y los cristianos y mañana hablarás con Obama. Por favor, escúchanos y cumple con nuestras demandas. Queremos una vivienda, queremos una vida decente”, dijo Harbi, que luego mostró igualmente su tarjeta de identidad.

El 30 de Marzo, Abdul Rahman Ali Ahmed Guereidi al Asiri publicó otro vídeo de dos minutos y 32 segundos en el que dijo:

“Yo, el ciudadano Abdul Rahman Ali Ahmed Guereidi, de Tuhama Asir (suroeste de Arabia Saudí), he visto los vídeos de algunos de nuestros jóvenes compatriotras como Dusari, Gamdi y Harbi pidiendo sus derechos, sus derechos más simples, y vemos ellos son encarcelados al día siguiente. El problema sois vosotros, la Casa de Saúd, que deliberadamente humilláis y empobrecéis al pueblo. Pobre Dusari. Su salario de 1.900 riales no es suficiente para pagar la cena a sus hijos. Al día siguiente (de la publicación del vídeo), vimos a uno de vuestros príncipes comprar un coche forrado por dentro con oro.”

“El problema con vosotros, Casa de Saúd, es que lo habéis robado todo. Habéis robado nuestro nombre y nuestro país y os lo habéis atribuido todo en base a no se sabe qué derecho. Habéis robado el Islam y lo habéis distorsionado. En lugar de haber distribuido las rentas del petróleo entre el pueblo, lo habéis empobrecido y humillado y luego habéis entregado tales rentas a los enemigos de la nación como (el ministro de Defensa egipcio Abdel Fatah al) Sisi.”

“Yo soy médico y he trabajado y dado clases en los hospitales de la Guardia Nacional y del Ministerio de Sanidad. En una ocasión tuvimos que poner a tres pacientes en la misma cama.”

“¿Donde está este Abdulá bin Abdul Aziz? Yo pregunto: ¿Por qué encarcelas a los que piden sus derechos?”

“Cuando grabo este vídeo has nombrado príncipe heredero al Príncipe Muqrin. La gente para vosotros son como simples muebles. Si hablamos, vamos a prisión. Yo te digo: si no te gusta este país, abandónalo. No es únicamente tuyo. La gente está pidiendo sus derechos. Queremos libertad y te advertimos. Yemen y Túnez y otros están en su segunda república y Arabia Saudí entrará en su primera república si no actúas”.

Luego, él enseñó su tarjeta de identidad a la cámara. El vídeo ha sido visto por 1,5 millones de usuarios.

El 31 de Marzo, Wafi Mardi Abdulá al Bidani al Harbi, de 18 años, apareció en otro vídeo después del arresto de su hermano Saúd tras la publicación de su vídeo.

“¿Qué hay de la libertad de expresión. ¿Desde cuando el pedir los derechos de uno se ha convertido en un crimen punible con la cárcel en el país de las Dos Mezquitas Sagradas, pese a que tales peticiones son legítimas y pacíficas? El error y el crimen son los propios arrestos. La opresión no funcionará.”

Él envió luego dos mensajes. El primero fue dirigido al príncipe Mohammed bin Nayef, el ministro del Interior, y en él señaló:

“Ya estamos hartos de retórica. Queremos vivir una vida decente, sin injusticia y persecución. Sólo pedimos nuestros derechos. Ten en cuenta que la barrera del miedo ha sido rota y que muchos saudíes no son cobardes”.

Él se dirigió luego a sus compatriotas contando una historia narrada por Ali ibn Abi Talib, que dijo que si ves al opresor continuar su injusticia entonces sabes que su fin es inevitable y que si ves a los oprimidos continuar resistiendo al opresor, sabes entonces que su victoria es inevitable. Él dijo luego:

“Si soy detenido, espero que todos estos llamamientos e iniciativas sirvan para algo”.

El joven Harbi también muestra a la cámara su tarjeta de identidad. Al cabo de un solo día, el vídeo recibió casi un cuarto de millón de visitas.

El 2 de abril, otro joven apareció an otro vídeo en el que se dirige al rey.

“Saludo a los héroes, Dusari, Harbi, Gamdi y otros”.

“¡Oh Abdulá bin Abdul Aziz! Mi nombre es Ganim Hamud Farah al Masarir al Dusari. Estos hombres son una corona sobre tu cabeza y la prisión no es el sitio que les corresponde. La prisión es un lugar para los opresores, malvados y tiranos.”

“¡Oh Abdulá bin Abdul Aziz! Eres un inmoral y un mentiroso. Prometiste fondos para los pobres hace ocho años, pero no los hemos visto”.

“¡Oh Abdulá bin Abdul Aziz! Has saqueado la riqueza del país bajo el disfraz de las ciudades económicas y los proyecctos ficticios que son sólo tinta sobre el papel”.

“¡Oh Abdulá bin Abdul Aziz! Has entregado la riqueza del país a las bandas de Sisi y para financiar golpes en todas partes y aún así dices que eres el Custodio de las Dos Mezquitas Sagradas”.

“¡Oh Abdulá bin Abdul Aziz! De cuando en cuando arrojas migajas a la gente y las llamas un regalo real. Si fueran parte de tu salario podrías llamarlas como quisieras, pero se trata de riquezas del pueblo que no son regalos ni de ti ni de nadie más”.

“¡Oh Abdulá bin Abdul Aziz! Dices que eres un rey humano, pero no hay nada de humano en ti. Ni siquiera tus hijas se han librado de tu perversidad y las has mantenido presas durante trece años”.

“¡Al pueblo de las Dos Mezquitas Sagradas! Todos los pueblos deponen a sus gobernantes cuando se convierten en ladrones, así que ¿cuándo diréis que los ladrones ya no tienen lugar entre vosotros?”.

Los mencionados vídeos muestran que la juventud saudí permanece desafiante y está dispuesta a pagar el precio por su postura. Los vídeos anteriores han estado circulando por las redes sociales y entre los jóvenes saudíes. Ellos son un reflejo de la opinión de la mayoría de los jóvenes saudíes y de sus preocupaciones. Lo más importante es que han sido hechos por los propios jóvenes.

La reacción del gobierno saudí ha sido negativa, como era de esperar. Las autoridades detuvieron a los autores de los vídeos, uno detrás de otro, pero los jóvenes saudíes continúan desafiando al poder.

Parece que estamos siendo testigos del nacimiento de una nueva ola de protestas políticas y de resistencia civil que vale la pena observar. Mientras tanto, el régimen saudí, con el apoyo de sus patrocinadores occidentales, continúa respondiendo con un enfoque de seguridad a las protestas y demandas de la gran mayoría de la población, que no tiene acceso a los privilegios de la familia real.


Fuad al Ibrahim – Al Akhbar