Teherán ha condenado la renovación de las sanciones británicas contra ciudadanos iraníes calificando éstas de “políticamente motivadas” y “fruto de los prejuicios”.

Teherán ha condenado la renovación de las sanciones británicas contra ciudadanos iraníes calificando éstas de “políticamente motivadas” y “fruto de los prejuicios”.

“Las sanciones son unilaterales, fruto de los prejuicios, políticamente motivadas y totalmente inaceptables”, dijo el viceministro de Exteriores para los Temas Europeos y Americanos, Mayid Tajte Ravanchi, el martes.

El Tesoro británico ha renovado las sanciones contra 15 responsables estadounidenses antiguos y actuales bajo el pretexto de violar los derechos humanos.

El Tesoro pidió el bloqueo de los activos financieros de estos iraníes en el Reino Unido y ha prohibido a las instituciones financieras británicas que realicen todo tipo de transacciones con ellos.

El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes, general Hassan Firuzabadi, y un antiguo ministro de Inteligencia, Heidar Moslehi, están entre los miembros de la lista.

En total, Reino Unido ha impuesto sanciones contra 86 iraníes.

El 10 de abril, el ministro de Exteriores británico, William Hague, presentó un informe de su ministerio titulado “Derechos Humanos y Democracia 2013” en el que criticaba la situación de los derechos humanos en 28 países, uno de ellos Irán.

El informe critica a Irán por no mejorar el estado de su democracia y la situación de los derechos humanos en el país el pasado año.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior del Parlamento iraní, Alaeddin Boruyerdi, criticó la decisión británica señalando que “las sanciones dirigidas contra algunos responsables iraníes se inscriben en el marco de los esfuerzos desesperados de Occidente para presionar a Irán”, dijo a Farsnews.

“Sin embargo, tales presiones no llevarán a que la República Islámica se pliegue ante el maximalismo de Occidente,” añadió Boruyerdi.