En un contexto de presiones árabes y turcas, el presidente sirio, Bashar al-Assad, ha decidido nombrar a un nuevo ministro de Defensa, el general Daud Rayha.
En un contexto de presiones árabes y turcas (retiro de los embajadores de Arabia Saudí, Bahrein y Kuwait para realizar consultas y la visita del ministro de Asuntos Exteriores turco a Damasco), el presidente sirio, Bashar al-Assad, ha decidido nombrar a un nuevo ministro de Defensa, el general Daud Rayha.
El general Rayha, nacido en 1947 en Damasco, se graduó de la Escuela Militar en 1968. Asistió a diversos cursos de formación militar y accedió en 2005 al rango de coronel.
Coronel Rayha ocupó muchos cargos militares, incluyendo el de jefe de una brigada y jefe de varias comisiones del Ejército.
En 2004 fue nombrado jefe del Estado Mayor del Ejército y las Fuerzas Armadas. Fue condecorado en varias ocasiones con honores militares.
Sobre el terreno, una fuente militar indicó que el jefe de las unidades del Ejército sirio encargadas de restablecer la seguridad y la estabilidad en la ciudad de Hama había manifestado que aquellas habían comenzado a salir de la ciudad, según la agencia SANA.
El gobernador de Hama, Naem Anas, señaló que grupos armados habían destrozado la ciudad, incluyendo propiedades públicas y privadas, y habían incendiado edificios, aterrorizando a los habitantes y desplazando a muchos de ellos hacia los pueblos y regiones vecinas.
Él dijo que las unidades del ejército habían devuelto la seguridad y la tranquilidad a la gobernación.
“A pesar de los acontecimientos vividos por la gobernación, muchas administraciones locales continuaron con su deber de garantizar los servicios mínimos a los ciudadanos, especialmente en el sector de la sanidad, la electricidad, el agua y las panaderías”, indicó. Él señaló que los equipos de restauración estaban trabajando duro para reparar las líneas y los cables de los teléfonos saboteados por grupos armados.
Además, una fuente de seguridad dijo en Hama que las unidades del Ejército se habían apoderado de grandes cantidades de armas y municiones y arrestado a grupos de hombres armados.
Según la agencia AFP, que cita a miembros del opositor Observatorio de Derechos Humanos de Siria (OSDH), siete civiles murieron hoy por disparos de las fuerzas de seguridad sirias, incluyendo cuatro en Deir Ezzor.
En Deir Ezzor, intensos tiroteos fueron escuchados en varios barrios de la ciudad y “una mujer y un joven murieron a causa de sus heridas”, dijo la organización no gubernamental a AFP.
Diecisiete personas fueron detenidas durante los registros realizados en el distrito de Huaiqa, en Deir Ezzor, añadió la misma fuente.
Según SANA, los heridos del Ejército y la Policía en el hospital militar de Homs hablaron de los asaltos que sufrieron durante su misión de defender a los ciudadanos y las propiedades públicas y privadas.
En declaraciones en la televisión siria, los heridos dijeron que fueron encargados de una misión en al-Hula y que durante su realización, grupos armados que habían cortado las carreteras con barricadas abrieron fuego contra ellos, causando heridas de bala en sus filas.
Otro soldado herido dijo que después de haber cumplido una misión con sus compañeros del batallón, 13 elementos armados les tendieron una emboscada en al-Rastan y dispararon un cohete RPG contra un vehículo, matando a cuatro soldados e hiriendo a dos.
En el plano internacional, el presidente norteamericano Barack Obama acordó con los líderes español e italiano, José Luis Rodríguez Zapatero y Silvio Berlusconi, el discutir nuevas sanciones contra Siria, informó el martes el servicio de prensa de la Casa Blanca.
“Los jefes de Estado han condenado la continua represión violenta del pueblo sirio por parte del régimen del presidente al-Assad, y acordado continuar las consultas sobre posibles medidas adicionales que podrían aumentar la presión sobre Damasco y apoyar a los sirios en sus aspiraciones democráticas”, dijo el gobierno de EEUU después de las conversaciones telefónicas mantenidas por el presidente Obama con los dos dirigentes europeos.