Los miembros de la milicia pro-rusa o pro-federalización que se encuentran en la ciudad de Slaviansk han comenzado a resistir el asalto contra la ciudad llevado a cabo por fuerzas ucranianas.
Los miembros de la milicia pro-rusa o pro-federalización que se encuentran en la ciudad de Slaviansk, de 110.000 habitantes, al Este de Ucrania, han comenzado a resistir el asalto contra la ciudad llevado a cabo por fuerzas ucranianas.
El miércoles, las autoridades de Kiev anunciaron que iban a reanudar una operación militar contra manifestantes en el Este de Ucrania a la que describieron como una “operación antiterrorista”. “Los servicios de seguridad actúan para liquidar a todas las formaciones que actúan actualmente en Kramatorsk, Slaviansk y las otras ciudades de las regiones de Donetsk y Lugansk”, dijo el miércoles el vicepresidente ucraniano, Vitali Yarema.
El jueves se informó que la lucha había comenzado en las afueras de Slaviansk. El miércoles, fuerzas ucranianas tomaron el control de la vecina ciudad de Sviatogorsk.
El titoreo estalló en la mañana del jueves entre las fuerzas de autodefensa de Slaviansk y hombres armados desconocidos, dijeron activistas antigubernamentales. El hospital de la ciudad informó que la batalla era seria y que el número de muertos y heridos continuaba aumentando.
“Hace algunos minutos se comenzó a luchar en los alrededores de Slaviansk”, dijo uno de los líderes de las fuerzas de autodefensa, Miroslav Rudenko, a Interfax. “Hay disparos en algunos de los puestos de control en la entrada de la ciudad”.
También ha habido informes sobre combates en la localidad de Artiomovsk, en la provincia de Donetsk.
“Artiomovsk no está en calma ahora. Hay combates. No hay informaciones sobre muertos o heridos”, dijo un representante de las fuerzas de autodefensa a Interfax.
Poco antes del asalto las milicias de Slaviansk informaron que estaban reforzando sus patrullas. “Procederemos a una distribución suplementaria de armas a los destacamentos de voluntarios, mejoraremos nuestras fortificaciones en el exterior y el interior de la ciudad y reforzaremos las patrullas”, declaró Enguen Gorbik, un portavoz de las milicias de autodefensa, ante la sede local del SBU (los servicios de seguridad ucranianos), en la que ondea una bandera rusa.
A la pregunta de donde provienen sus armas, Gorbik, con traje militar, dijo que ellas fueron “tomadas al enemigo”. Moscú no ha oficialmente respondido a los llamamientos de Viacheslav Ponomariev, el hombre fuerte de los separatistas, para que les sean entregadas armas.
“Dos mil miembros de los grupos de autodefensa han sido movilizados para responder a un eventual ataque”, añadió el portavoz antes de jurar que no hay ni un solo soldado ruso en sus filas, contrariamente a lo que afirman los medios occidentales y las autoridades de Kiev.
Un miembro del Sector Derechista que fue hecho prisionero por las milicias pro-rusas fue mostrado el miércoles por la mañana a la prensa delante del edificio del SBU. Su nombre era Dimitro Tomarvski y fue arrestado “por los ocupantes de un vehículo de patrulla”. Él iba a “fotografiar los movimientos de las milicias y los lugares donde se hallan las barricadas”.