21-11-2024 11:30 PM Tiempo de Jerusalén

Al Qaida controla ahora una antigua base militar de EEUU en Libia

Al Qaida controla ahora una antigua base militar de EEUU en Libia

Al Qaida ha tomado bajo su control una antigua base secreta creada por las Fuerzas Especiales de EEUU en la costa de Libia para sus operaciones antiterroristas.

Al Qaida ha tomado bajo su control una antigua base secreta creada por las Fuerzas Especiales de EEUU en la costa de Libia para sus operaciones antiterroristas, según diversos medios de información, foros yihadistas y responsables de EEUU.

Según señala la publicación norteamericana The Daily Beast, en el verano de 2012 los Boinas Verdes estadounidenses prepararon una base militar a 27 kms al oeste de Trípoli con el fin de albergar al primer contingente de tropas libias que iban a ser entrenadas por asesores estadounidenses en operaciones antiterroristas. Menos de dos años después, grupos vinculados a Al Qaida han tomado el control de la base y la emplean para fomentar el caos en la Libia post-Gadafi y preparar a militantes para combates en otros países.

El programa estadounidenses resultó un fracaso. Las Fuerzas Especiales estadounidenses comenzaron el entrenamiento en el otoño de 2012. En principio, el programa estaba ideado para 100 miembros de las fuerzas de operaciones especiales libias, pero incluso ese modesto objetivo no fue logrado. “El programa no consiguió los resultados que esperábamos”, dijo Carter Ham, un general retirado que lideró el Mando de EEUU en África. Factores como la debilidad del liderazgo del Ejército libio, la indisciplina de las tropas libias y la incapacidad de las autoridades de garantizar la seguridad sobre el terreno hicieron imposible la continuación del programa.

En junio de 2013, dos milicias entraron en la instalación y se apoderaron del equipo militar que allí había. Según los norteamericanos, no había instructores de esa nacionalidad allí en aquel momento y los soldados que protegían la base eran todos libios. De este modo, las armas estadounidenses, que incluían rifles M-4, equipos de visión nocturna, municiones y vehículos militares, acabaron en las manos de las milicias.

Tras la incursión de junio, el embajador de EEUU canceló el programa en Libia hasta que la seguridad del equipo y el personal estadounidenses fuera garantizada, algo que las autoridades libias no han hecho hasta el día de hoy.

La pasada semana, la prensa libia señaló que este campo, denominado “Número 27” por el kilómetro que ocupa en la carretera entre Trípoli y Túnez, está ahora bajo el control de Ibrahim Ali Abu Bakr Tantush, un veterano dirigente de Al Qaida asociado de Osama bin Laden. Él dirige ahora a un grupo de militantes salafistas en la antigua base Libia.

Tantush fue añadido a la lista de terroristas de EEUU y la ONU en 2.000 por su papel en la voladura de dos embajadas estadounidenses en Kenya y Tanzania en 1998.

Un responsable de defensa de EEUU dijo a The Daily Beast que estas informaciones sobre la presencia de Al Qaida en el campo se corresponden con los informes de la Inteligencia estadounidense en Libia. Él añadió que este campo es considerado hoy como “un área prohibida”, o sea, un lugar donde las fuerzas estadounidenses tendrían que abrirse paso luchando para ganar acceso al mismo.

Desde la invasión por la OTAN en 2011, Al Qaida y las milicias que están vinculadas a ella han ido ganando cada vez más influencia en Libia. El hecho de que uno de los líderes de esta organización tenga establecida una base a sólo 27 kilómetros de la capital muestra hasta qué punto se ha deteriorado la seguridad en el país.

Seth Jones, un experto en Al Qaida de la Rand Corporation, afirma que Libia es ahora un santuario para muchos grupos afiliados a la organización en el Norte de África y el mundo árabe. “Hay varios campos de entrenamiento de una amplia gama de grupos pro-Al Qaida y yihadistas que han ido apareciendo en el suroeste y el noreste de Libia y alrededor de las ciudades de Trípoli y de Bengasi”.