El asesor presidencial ruso, Serguei Glaziev, ha propuesto un plan de acción para proteger la economía rusa en respuesta a una posible extensión de las sanciones de EEUU y la UE.
El asesor presidencial ruso, Serguei Glaziev, ha propuesto un plan de acción para proteger la economía rusa en respuesta a una posible extensión de las sanciones de EEUU y la UE.
Según el periódico Vedomosti, el plan de Glaziev, tiene dos objetivos: responder rápidamente a las sanciones y minimizar la dependencia de Rusia del mundo exterior. El plan subraya que es necesario reducir la circulación del dólar y el euro en la economía rusa. Estos cambios han de afectar a las transacciones financieras del sector público, de las compañías privadas e incluso de las personas ordinarias.
Según el periódico Vedomosti, el plan prevé retirar todos los activos de los países que aprueben las sanciones y vender los bonos de sus gobiernos. El Banco de Rusia debería reducir sus activos en dólares muy rápidamente.
Glaziev aconseja utilizar las monedas nacionales de Rusia y de los países de la Unión Aduanera -liderada por Rusia- y otras monedas distintas al dólar y el euro. Las cuentas en los bancos comerciales en divisas pertenecientes a países que impongan las sanciones serían congeladas.
Él también señaló que era necesario llevar a cabo un trabajo de explicación a la población.
Por su parte, el ministro de Agricultura ruso, Nikolai Fiodorov, ha rechazado la amenaza de sanciones afirmando que las importaciones de comida de otros países compensarán cualquier corte decidido por la UE.
Él señaló que no esperaba un gran déficit de productos alimenticios en caso de sanciones en este sector y dijo que sería fácil encontrar otros suministradores de alimentos alternativos si los países occidentales decidían un embargo contra Rusia.
“Hemos tenido siempre países alternativos, que podrían rápidamente suministrarnos productos”, dijo Fiodorov al ser preguntado sobre una posible reducción de los suministros por parte de los países de la UE. Él dijo que algunos países estaban diciendo ya que “nos gustaría ser los primeros en suministraros productos como alternativa a Polonia o a cualquier otro país”.
Estos comentarios se producen poco después de que el presidente de EEUU dijera que su país discutiría más sanciones contra Rusia con los líderes de la UE debido a la postura de Moscú sobre Ucrania.
Las declaraciones de Fiodorov se hacen eco de las del primer ministro Dimitri Medvedev, que dijo a principios de semana que Moscú está preparado para proteger su economía y a sus ciudadanos.