El fundador de la Red Liberal saudí, Raif Badawi, fue condenado el miércoles a 10 años de prisión y 1.000 latigazos en el reino por un tribunal de apelación, señaló la presidenta de dicha red.
El fundador de la Red Liberal saudí, Raif Badawi, fue condenado el miércoles a 10 años de prisión y 1.000 latigazos en el reino por un tribunal de apelación, señaló la presidenta de dicha red, Suad Shammari, a AFP.
Él opositor, arrestado en junio de 2012, fue sentenciado igualmente a pagar una multa de un millón de riales (unos 270.000 dólares), precisó Shammari.
Badawi fue condenado por un tribunal de primera instancia en Julio de 2013 a siete años de cárcel y 600 latigazos, según la militante, que calificó la sentencia de “indignante” y aseguró que él era “un prisionero de conciencia”.
Las autoridades han cerrado el sitio de Internet que él dirigía y que, según Suad Shammari, “criticaba a la policía religiosa, los manuales escolares y ciertas fatuas (edictos religiosos) de clérigos saudíes.”
Arabia Saudí aplica una corriente religiosa, el wahabismo, considerada como una visión extremista que se aleja de las enseñanzas del Islam.
La activista aseguró que el sitio de Internet continúa funcionando a partir de otro servidor.
La actividad de la Red Liberal saudí es sólo virtual. Ella intentó en mayo de 2011 organizar una conferencia en Yeddah, pero debió renunciar debido a la presión de las autoridades y el establishment religioso.
Shammari dijo que “son los dirigentes religiosos y no el gobierno” los que han impuesto la condena a Raif Badawi.
El reino, una monarquía absoluta dirigida por la familia de los Al Saúd, ha endurecido la represión en el transcurso de los últimos meses contra activistas pro-derechos humanos y opositores políticos.
En abril, Walid Abul Jeir, un eminente activista pro-derechos humanos, fue detenido por “insultos a las autoridades”.
A finales de marzo, tres personas fueron arrestadas por haber difundido en YouTube vídeos en los que reclamaban la mejora de su nivel de vida y criticaban la corrupción.
En diciembre, la organización pro-derechos humanos Human Rights Watch llamó a Arabia Saudí a dejar de intimidar a los activistas y a dotarse de un código penal compatible con las normas internacionales sobre derechos humanos.