A pesar de la presión internacional sobre Siria, que se manifiesta en las sanciones económicas unilaterales de algunos países occidentales, Moscú ha continuado suministrando armas a Damasco.
A pesar de la presión internacional sobre Siria, que se manifiesta en las sanciones económicas unilaterales de algunos países occidentales, Moscú ha continuado suministrando armas a Damasco.
“Mientras no se anuncien sanciones y no haya órdenes o instrucciones por parte del gobierno, estamos obligados a respetar nuestras obligaciones contractuales, que es lo que estamos haciendo ahora”, dijo el jefe de la agencia de la agencia estatal de exportación de armas Rosoboron, Anatoly Isaikin, a los periodistas el miércoles.
En unas declaraciones efectuadas durante la exhibición aérea internacional MAKS, celebrada a las afueras de Moscú, el jefe de exportaciones de Rosoboron dijo que Rusia había suministrado aviones de entrenamiento Yak-130 y equipos militares.
La semana pasada, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, pidió a Rusia que dejara de suministrar armas a su viejo socio comercial. “Queremos que Rusia deje de vender armas al régimen de Assad”, dijo Clinton en una entrevista con CBS News.
Rusia respaldó este mes una declaración del Consejo de Seguridad de la ONU que condenaba “las generalizadas violaciones de los derechos humanos y el uso de la fuerza contra civiles por parte de las autoridades sirias,” pero se negó a apoyar sanciones.