Turquía se opone a una intervención extranjera en Siria, dijo el martes el ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu.
Turquía se opone a una intervención extranjera en Siria, dijo el martes el ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu.
“No vamos a aceptar las operaciones contra civiles durante el mes de Ramadán. Tomaremos todas las medidas para evitarlo”, añadió el jefe de la diplomacia turca, sin precisar más.
“Vamos a lanzar todo tipo de advertencias a Siria para que las demandas del pueblo sirio sean satisfechas”, dijo Davutoglu, que discutió el tema con el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, en una entrevista telefónica el martes.
Por otro lado, el ministro de Defensa turco, Ismet Yilmaz, dijo el martes que Turquía no tenía la intención de crear una zona de exclusión en la frontera con Siria, según lo declarado por los medios de comunicación turcos.
“No queremos crear una nueva frontera con minas o una zona de exclusión”, dijo el ministro de Defensa en Sivas, citado por la agencia Anatolia.
“Por el contrario, hemos aprobado una ley una ley para limpiar el campo minado que existe entre Siria y nosotros”, agregó.
Los medios de comunicación turcos habían afirmado recientemente que Turquía tenía la intención de crear una zona de exclusión en la frontera turco-siria para impedir la afluencia de refugiados de Siria.
Turquía acoge en la actualidad a unos 7.000 refugiados sirios en campamentos situados en la provincia de Hatay, al sur del país.