El candidato presidencial egipcio Abdel Fattah El Sisi aseguró estar interesado en fortalecer nexos con América Latina durante una reunión con embajadores de esa región.
El candidato presidencial egipcio Abdel Fattah El Sisi aseguró estar interesado en fortalecer nexos con América Latina durante una reunión con embajadores de esa región, reveló hoy una fuente diplomática.
Los embajadores de Cuba, Brasil, Argentina, Ecuador, Chile, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Venezuela sostuvieron un encuentro a puertas cerradas con el aspirante en la sede del Ministerio de Defensa, acorde con las precisiones.
Los latinoamericanos tienen relaciones profundas e históricas con Egipto, aseguró el ex ministro de Defensa, favorito en las encuestas para ganar los comicios presidenciales, programados para el 26 y 27 de mayo próximo.
El aspirante expresó su satisfacción "por esta importante oportunidad de transmitir la verdadera imagen de lo que ocurre en estos momentos en Egipto y explicar a los países del mundo la situación después de los acontecimientos del 30 de junio (de 2013)".
A fines de junio pasado millones de egipcios se volcaron en las calles para protestar contra el Gobierno del presidente islamista Mohamed Morsi, depuesto por el Ejército tres días después.
Los egipcios expresaron su deseo de cambio con el apoyo del Ejército basándose en las sólidas relaciones que tiene con las Fuerzas Armadas, enfatizó El Sisi al describir esos acontecimientos.
Desde entonces el mariscal, autorizado por las Fuerzas Armadas a presentarse como candidato, navega en una ola de popularidad entre vastos sectores egipcios y es combatido a sangre y fuego por la Hermandad Musulmana, de cuya cúpula Morsi era miembro.
La identidad egipcia es nacional, no doctrinal, y permite a todos los ciudadanos vivir en su país sin importar su religión, afirmó El Sisi, según el informante, que asistió al encuentro.
Al respecto aseguró que el derrocado Gobierno de Mursi "imprimió al Estado fundamentos confesionales porque pretendía formar un estado religioso que iba a convertirse en foco de terrorismo en la zona (de Oriente Medio), pero los egipcios no lo permitieron".
Sobre su plataforma electoral subrayó que "No tenemos otra opción que movernos con fuerza y rapidez porque no podemos dejar la herencia de problemas críticos a las futuras generaciones".
Egipto tiene problemas que requieren programas que no dependen solo del Gobierno sino un proyecto para levantar el ánimo de los egipcios e impulsar un verdadero desarrollo político, económicos y social, añadió el ex militar de 59 años.
En la reunión también estuvieron presentes los encargados de negocios de Brasil, Bolivia, Chile y México.