Air France ha sido condenada por discriminación por el tribunal de apelación de París por haber obligado a desembarcar en 2012 a una activista pro-palestina de un avión que se dirigía a Tel Aviv.
Air France ha sido condenada por discriminación por el tribunal de apelación de París por haber obligado a desembarcar en 2012 a una activista pro-palestina de un avión que se dirigía a Tel Aviv afirmando que no era ni judía ni israelí.
En primera instancia, la compañía aérea francesa fue condenada a pagar 10.000 euros de multa y otros 3.000 euros más en concepto de daños y perjuicios a la pasajera.
El tribunal de apelación confirmó el martes el juicio, pero no ha mantenido la obligación de la publicación del fallo exigida en la primera instancia.
Durante la audiencia de la apelación, el fiscal general había pedido la absolución de Air France alegando que la verdadera razón del desembarco de la pasajera no era su origen sino la negativa de las autoridades de ocupación israelíes a recibirla en su territorio, lo cual afirmó era “completamente legal”.
“Estamos satisfechos de este fallo después de los argumentos del fiscal general, pero creemos importante que esta sentencia sea publicada en la prensa, habida cuenta de la actitud de Air France que se obstina en no reconocer su responsabilidad en este tema”, dijo a AFP uno de los abogados de la litigante, Clémence Bectarte.
Por su parte, el abogado de Air France, Fabrice Pradon, dijo que la compañía había obrado por “razones humanitarias y con la voluntad de ahorrar a la querellante su arresto a su llegada a Tel Aviv por parte de las autoridades israelíes”. También dijo que la compañía ha dado instrucciones para que este tipo de incidentes “no se repita”.
“Esto no es una discriminación y no merece una condena penal”, afirmó.
Ante el tribunal de apelación, sin embargo, otro abogado de la demandante, Patrick Baudoin, estimó, por el contrario, que la discriminación había quedado probada.