El presidente chino, Xi Jinping, pidió el martes la creación de una nueva estructura de seguridad en Asia basada en un grupo regional que incluiría a Rusia e Irán y excluiría a EEUU.
El presidente chino, Xi Jinping, pidió el martes la creación de una nueva estructura de seguridad en Asia basada en un grupo regional que incluiría a Rusia e Irán y excluiría a EEUU.
El presidente Xi habló así durante un encuentro de la Conferencia sobre la Interacción y Medidas de Confianza en Asia, (CICA), un obscuro grupo establecido en 1992 a propuesta de Kazajistán, que ha adquirido relevancia en un momento en el que Pekín busca extender su influencia en Asia y el mundo.
“Necesitamos incrementar nuestra cooperación en temas de seguridad y establecer una nueva estructura de seguridad,” dijo Xi hablando a una audiencia que incluía al presidente Vladimir Putin de Rusia, al presidente Hassan Rohani de Irán y a los líderes de los países de Asia Central.
La CICA, cuyos 24 miembros también incluyen a Corea del Sur, Tailandia y Turquía, debería convertirse en “una plataforma para el diálogo y la cooperación en temas de seguridad”, dijo Xi. “También debería establecerse un mecanismo de consulta en temas de defensa” y un “centro de respuesta de seguridad” para los casos de crisis.
Esta propuesta supone la última iniciativa de Pekín en temas de defensa en Asia y el contexto de los países en vías de desarrollo y busca, entre otras cosas, reducir o eliminar la influencia de EEUU y otros estados occidentales en esas áreas.
En 2001, China fundó la Organización de Cooperación de Shanghai, junto con Rusia y cuatro naciones de Asia Central, para contrarrestar la entonces creciente influencia estadounidense en la región tras la invasión de Afganistán y combatir a los movimientos extremistas y separatistas. China es también uno de los promotores del BRICS, que reúne además a Rusia, India, Brasil y Sudáfrica.
Pekín acusa a Washington de incrementar su presencia militar en las inmediaciones de China, en el marco del “giro hacia Asia” de la Administración Obama, y de alimentar tensiones en la región.
Xi considera que las naciones asiáticas necesitan responder colectivamente a los crecientes problemas, incluyendo el terrorismo, la seguridad en el ciberespacio y los desastres naturales.
“Debemos mostrar una tolerancia cero con respecto al terrorismo, el separatismo y el extremismo, y debemos reforzar la cooperación internacional e incrementar la lucha contra estas tres fuerzas”, señaló.