El Estado Islámico en Iraq y Siria (EIIS) se ha convertido en un problema para los gobiernos de ambos países, que están cooperando ahora en la lucha contra el grupo.

El Estado Islámico en Iraq y Siria (EIIS) se ha convertido en un problema para los gobiernos de ambos países, que están cooperando ahora en la lucha contra el grupo.

En los últimos días, algunas fuentes han informado de una actividad incrementada de la aviación siria, que ha estado bombardeando las bases del EIIS en Raqqa y la provincia de Hasakah. Estos ataques han contado con la colaboración de Iraq, que ha propocionado datos de inteligencia a Siria. Raqqa se ha convertido, de facto, en la capital del EIIS y es la única capital provincial siria en poder de los grupos armados.

Según el Observatorio Sirio pro-Derechos Humanos, con sede en Londres, los ataques aéreos han tenido una intensidad mucho más fuerte que lo normal y serían una respuesta al hecho de que el EIIS ha trasladado material pesado, incluyendo tanques a Siria desde Iraq, donde ha capturado gran número de armas del Ejército iraquí, especialmente en la provincia de Nínive.

En Raqqa, la fuerza aérea bombardeó el cuartel general del EIIS así como el edificio de los tribunales religiosos establecidos por el grupo. Fotografías del lugar muestra los cráteres en el suelo y escombros delante de la puerta principal del cuartel general del EIIS.

En la ciudad de Shaddadi, en Hasakah, la aviación siria atacó también el cuartel general del EIIS en la provincia.

En este sentido, la ofensiva del EIIS en Iraq podría llevar a que las guerras en ese país y en Siria se fundan en una sola y ambos gobiernos estrechen la cooperación contra los terroristas que luchan en ambos países.

El EIIS pretende crear un estado en la franja de territorio que controla en las dos naciones y expandir luego su control a otros estados como Jordania.