Los procesos de reconciliación, que llevan a la rendición pactada de combatientes a las fuerzas gubernamentales, siguen desarrollándose en diversas partes de Siria.

Los procesos de reconciliación, que llevan a la rendición pactada de combatientes a las fuerzas gubernamentales, siguen desarrollándose en diversas partes de Siria.

En el barrio de Qabún, al norte de la capital siria y en el marco de la reconciliación que ha tenido lugar allí, decenas de milicianos se han rendido a las fuerzas gubernamentales con sus armas pesadas. En base al acuerdo, ellos pueden conservar sus armas ligeras.

Según el Ministerio de Justicia sirio, 46 militantes armados se han rendido igualmente en la provincia de Homs.

En el barrio de Al Waer, el último enclave de la ciudad de Homs en manos de los militantes, se ha declarado un cese el fuego durante el mes de Ramadán, lo cual ha permitido introducir convoys de alimentos en él. Continúan ahora las negociaciones para que el acuerdo sea mantenido después.

En total, 404 militantes se rindieron el lunes en diferentes partes del país y su estatuto legal ha quedado regularizado.

En función del acuerdo, ellos no serán perseguidos por las fuerzas de seguridad. También se les ha ofrecido que opten entre unirse a las fuerzas gubernamentales o volver a la vida civil.

Varias localidades en diferentes partes de Siria han pasado al control del Ejército gracias a los procesos de reconciliación.