Responsables turcos retirados se han unido a las filas de la organización terrorista, famosa por sus atrocidades, tanto en Siria como en Iraq.

Los peligrosos vínculos entre la milicia del Estado Islámico y Turquía se revelan y confirman día tras día.

Responsables turcos retirados se han unido a las filas de la organización terrorista, famosa por sus atrocidades, tanto en Siria como en Iraq.

Es un periódico turco, Idilink, el que ha revelado este hecho, informó la agencia oficial siria SANA. Él asegura que el gobierno turco está perfectamente al corriente de esta colaboración.

A cambio de sus servicios, estos oficiales perciben salarios importantes de manos del servicio de inteligencia turco.

“Esta acción, organizada y coordinada por los servicios de inteligencia turcos, era ya conocida en el país”, señala el periódico citando a un antiguo oficial turco retirado.

Según él, son los servicios de inteligencia turcos los que organizan el combate del EI y otras organizaciones que combaten en Siria. Él recordó, a este respecto, la participación en persona de oficiales turcos en la batalla llevada a cabo por las milicias para apoderarse de Kassab, al norte de la provincia costera de Latakia, limítrofe con Turquía.

“Las personas camufladas que participaron en la ofensiva contra Kassab eran oficiales mercenarios turcos; su identidad quedó desvelada cuando se quitaron la capucha”, prosiguió el oficial turco, según el cual el Estado Mayor del Ejército turco está perfectamente al corriente de esta participación. Recientemente, Kassab ha sido liberada por el Ejército sirio.

Otras fuentes han manifestado al periódico que el EI se aprovisiona de sus necesidades logísticas a través de una sociedad igualmente turca y que está dirigida por un oficial retirado originario de Konia. Élla le suministra piezas de recambio para las armas así como armas ligeras y uniformes militares.

Esta revelación no es la primera de su tipo. Otro periódico turco Taraf informó en el mes de junio de la asistencia proporcionada al EI en la provincia de Raqqa por otra sociedad turca, la Fundación del Socorro Islámico.

No es un secreto para nadie que Turquía ha abierto sus fronteras a los militantes takfiris llegados de las cuatro esquinas del mundo para luchar en Siria.

La ayuda que Ankara ofrece a los rebeldes de la rama armada de Al Qaida en Siria, el Frente al Nusra, es algo igualmente muy conocido en medios turcos.

Este apoyo del gobierno turco a las organizaciones extremistas takfiris y criminales ha sido tratado por el autor turco Salim al Ramiti, según el cual dicho gabinete vive en un estado de histeria que le induce a tomar decisiones rápidas y extrañas. El señaló que los terrorisras de Al Qaida circulan a su antojo por la capital turca.

“La sociedad turca rebosa de extremistas que simpatizan con Al Qaida y sus métodos y que están dispuestos a ejecutar lo que ella les ordene hacer en el momento escogido por sus dirgentes. Erdogan y su partido acabarán por hallarse en el centro de un enorme fuego”, advirtió.