Los 28 ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea manifestaron hoy su “extrema preocupación por la escalada de violencia en la Franja de Gaza”.

Los 28 ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea manifestaron hoy su “extrema preocupación por la escalada de violencia en la Franja de Gaza” y reclamaron a israelíes y palestinos que “apliquen de buena fe un alto el fuego inmediato”.

Tras defender el derecho “legítimo” de Israel a defenderse, los ministros reclamaron que “la operación militar israelí debe ser proporcional y en línea con el Derecho Humanitario Internacional” y subrayaron “la necesidad de proteger a los civiles en todo momento".

Además, condenaron “con firmeza” los ataques “criminales e injustificables” con cohetes de Hamás y otros grupos de la resistencia palestina contra Israel desde la Franja de Gaza e les instaron a poner fin "inmediatamente" a los mismos y a “renunciar a la violencia”.

También exigieron el desarme de “todos los grupos terroristas” en Gaza, declaración ésta que fue saludada por el gobierno israelí.

En realidad, los llamamientos de la UE a que la operación de genocidio israelí contra el pueblo de Gaza, que ha causado la muerte a 652 civiles hasta la fecha, sea “proporcional” y “en línea con el Derecho Humanitario internacional” es una muestra de la más abyecta hipocresía. Incluso más risible es la petición para que los palestinos “renuncien a la violencia” ignorando aquí deliberadamente que los territorios ocupados palestinos han estado sujetos a la ocupación militar israelí desde 1967 y que la ley internacional legitima a los pueblos ocupados a resistir a los ocupantes.

La declaración, que guarda sus condenas para los lanzamientos de cohetes y misiles palestinos contra objetivos en Israel y aboga por el desarme de los palestinos frente a sus verdugos, revela una abierta complicidad de la UE con el genocidio israelí en Gaza.