El Ministerio del Interior egipcio confirmó la muerte de dos coroneles de las Fuerzas Centrales de Seguridad en un atentado ejecutado por desconocidos armados que escaparon sin ser detenidos.
El Ministerio del Interior egipcio confirmó la muerte de dos coroneles de las Fuerzas Centrales de Seguridad en un atentado ejecutado por desconocidos armados que escaparon sin ser detenidos, según un parte difundido el sábado.
Ambos regresaban a su casa cuando fueron emboscados en la ciudad de Sheij Zuweid, en el Sinaí, uno de los puntos más candentes de la sorda guerra entre las autoridades y grupos armados cuya violencia aumentó tras la deposición por el Ejército del ex presidente Mohamed Morsi en julio del año pasado.
El parte del portavoz del Ministerio del Interior, identifica a los muertos como los coroneles Amr Fathi, responsable de seguridad del área, y Mohammed Salmi, comandante de sector de guardafronteras, y miembro de un poderoso clan beduino de la península, localizada al noreste del país.
La acción, enmarcada en la guerra de guerrillas de entidades islamistas hostiles al nuevo poder, sigue a la muerte días atrás de 22 guardafronteras egipcios en el puesto de Wadi el Jedid, en la frontera con la convulsa Libia, en el noroeste del país.
El alto número de bajas conmocionó a la sociedad y puso en dudas los esfuerzos de las autoridades para controlar la situación de seguridad en el país, a pesar de alegaciones oficiales de que los movimientos armados integristas han sido neutralizados.
En una alocución al país el jueves pasado, el presidente egipcio, Abdel Fattah El Sisi, juró que los atacantes al puesto guardafronteras serán arrestados o liquidados.
Una versión de medios oficiales egipcios aseguró que los atacantes fueron “reclutados por servicios de inteligencia extranjeros” y provenían de Libia.