Un cese el fuego de 72 acordado con la mediación de la ONU se colapsó en la Franja de Gaza pocas horas después de ser declarado.
Un cese el fuego de 72 acordado con la mediación de la ONU se colapsó en la Franja de Gaza pocas horas después de ser declarado. Israel ha reanudado sus ataques de artillería contra diversos lugares de la Franja matando e hiriendo a varios palestinos y los miembros de la Resistencia palestina han lanzado fuego de mortero contra posiciones israelíes.
Un cese el fuego de tres días había entrado en vigor en la Franja de Gaza poco antes en medio de esperanzas de que esto pusiera fin a la agresión de cuatro semanas de Israel contra el sitiado enclave palestino.
El balance oficial al amanecer del viernes era de 1.458 palestinos muertos y 8.400 heridos, según Ashraf al Qidra, portavoz del Ministerio de Sanidad en Gaza.
A menos de tres horas de iniciarse la tregua los bomberos apagaron el incendio un microbus de pasajeros alcanzado por un misil procedente de territorio israelí.
Decenas de voluntarios acudieron a socorrer a las víctimas y equipos especializados retiraron el vehículo del medio de la carretera para permitir el libre desplazamiento de ambulancias y otros autos privados que trasladaban heridos.
Las fuerzas militares sionistas permanecieron en todo momento desplegadas sobre el terreno, lo cual descartó la posibilidad de que éste fuera el preámbulo de algún acuerdo para poner fin inmediato a las agresiones.
Israel ha afirmado que persigue objetivos del grupo armado palestino Hamas, pero los hechos diarios muestran que los proyectiles israelíes son lanzados contra vehículos civiles, mezquitas, mercados, viviendas y refugios de la ONU. Ancianos, mujeres y niños resultan las víctimas principales de los continuos bombardeos, incluso en sitios supuestamente seguros.
La televisión pública palestina mostró el interior de un hospital, donde un padre despedía en sus brazos el cuerpo de su hija pequeña envuelto en una sábana.
Hospitales y morgues han recibido en los últimas horas más cuerpos que las capacidades reales para las que fueron diseñados.
La vida transcurre en la Franja en medio de un creciente desabastecimiento de alimentos básicos, la escasez de agua potable y la falta de electricidad, ya que la única planta generadora de energía de la zona fue bombardeada días atrás.
Bombardeo de un mercado
En uno de sus últimos ataques, cientos de civiles resultaron muertos cuando el mercado de Shuyaiya fue bombardeado por los israelíes, causando la muerte a 17 civiles y 160 heridos. Los muertos fueron en su totalidad civiles que estaban intentando procurarse algunos alimentos.
Entre las víctimas fatales hubo varios niños y jóvenes, cuyas imágenes ensangrentadas transmitió la televisión pública de Palestina.
El humo negro enturbiaba la zona en llamas en medio del repicar de sirenas de las ambulancias que no daban abasto para el traslado de muertos y heridos hacia los hospitales más cercanos al mercado atacado.
Además, un entrenador del equipo futbolístico local, Ahed Zaqqut, murió ayer víctima de una bomba que alcanzó su vivienda en el noroeste de la ciudad de Gaza.
Funcionarios de la Federación Palestina de Fútbol repudiaron las acciones israelíes y rindieron tributo al entrenador Zaqqut.