Manifestantes palestinos se concentraron en el exterior de la sede de la ONU, en el norte de la Franja de Gaza, después de que el presidente Obama pronunciara un discurso oponiéndose a la adhesión de un Estado palestino.
Manifestantes palestinos se concentraron en el exterior de la sede de la ONU, en el norte de la Franja de Gaza, después de que el presidente estadounidense Barack Obama pronunciara un discurso en la Asamblea General de la ONU oponiéndose a la adhesión de un Estado palestino a la organización internacional, informó Press TV.
El jueves, manifestantes furiosos gritaron consignas y portaron pancartas en la Ciudad de Gaza, denunciando, lo que ellos denominaron como el doble rasero que Washington aplica a su política sobre Oriente Medio y sus esfuerzos para privar a los palestinos de su libertad, dijo Yousef Al-Helou, corresponsal de Press TV en Gaza.
Los manifestantes también expresaron su apoyo al plan de la Autoridad Palestina (AP) de pedir el viernes a la ONU que reconozca a Palestina como estado miembro de pleno derecho.
En su discurso al 66 período anual de sesiones de la Asamblea General en Nueva York el miércoles, Obama reiteró su oposición a la iniciativa palestina para convertirse en miembro de la ONU y afirmó que Israel estaba rodeado de vecinos hostiles. “La paz no vendrá a través de declaraciones y resoluciones de las Naciones Unidas - si fuera tan fácil, ya habría sido lograda”, dijo.
En una reunión con el jefe de la AP, Mahmoud Abbas, Obama también afirmó que Washington vetaría en el Consejo de Seguridad la propuesta de adhesión del Estado de Palestina a la ONU.
Walid Awad, un responsable de la facción palestina Partido Popular con sede en Gaza, dijo a Press TV, “el discurso de Obama fue provocador. Nuestra respuesta será continuar la lucha a través de nuestra resistencia popular. Pedimos a nuestros líderes que no cedan ante ninguna presión estadounidense e israelí”.
Amal Hamad, un responsable de la facción palestina Fatah, dijo: “Apoyamos la iniciativa de Abbas. Tenemos derecho a tener nuestro propio estado independiente y a ser reconocidos por las Naciones Unidas. Nos hemos acostumbrado ya a la postura de EEUU, dominada por los prejuicios a favor de Israel”.
Un activista pro derechos humanos, Mostafa Abed al-Ati, dijo: “Estamos muy decepcionados por el discurso de Obama. EEUU e Israel se han convertido en los países más odiados por sus políticas represivas. Dieciocho años de conversaciones de paz (con Israel) no han puesto fin a la ocupación israelí.”
Obama expresó su apoyo a la reanudación de las conversaciones entre la Autoridad Palestina y Tel Aviv -rotas por la política israelí de expansión de los ilegales asentamientos israelíes en la Cisjordania y el Jerusalén Este ocupados- diciendo que “en última instancia, son los israelíes y los palestinos -no nosotros- los que tienen que llegar a un acuerdo sobre las cuestiones que los dividen.”
“La democracia estadounidense es una gran mentira”, protestó al-Ati.
En el centro de la ciudad de Ramallah, en la Cisjordania ocupada, miles de palestinos también se manifestaron en contra de Washington y Tel Aviv. “Es una vergüenza para EEUU el apoyar la ocupación”, gritaban los manifestantes.
En la ciudad de Nablus, en el norte de Cisjordania, cientos de maestros protestaron en el centro de la ciudad con carteles que decían: “EEUU es un socio de la ocupación israelí y el terrorismo” y “Obama quiere comprar votos con la sangre palestina”. “¡Qué vergüenza para aquellos que afirman ser demócratas”, decía una pancarta.
Essam Dababseh, portavoz de los maestros, dijo: “Queremos apoyar a los líderes palestinos frente a la presión estadounidense.”