El secretario general de Hezbolá presentó un estudio profundo sobre la estructura doctrinal del así llamado Estado Islámico, dando prueba de un profundo conocimiento de esta fuerza terrorista.
El secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasralá, ha presentado a sus diferentes anfitriones una visión clara y precisa sobre lo que pasa en la actualidad en la región, ya sea el terrorismo israelí en la Palestina ocupada o el terrorismo takfiri en Iraq.
Su Eminencia lamentó en primer lugar la exageración que ciertos medios realizan de forma deliberada en lo que se refiere al número de mártires de Hezbolá que han caído en los recientes combates en Siria, especialmente en la región de Qalamún, señalando que el partido no oculta nunca el nombre de un mártir sino que, por el contrario, está orgulloso de ellos y no duda en proclamarlos.
El secretario general de Hezbolá presentó un estudio profundo sobre la estructura doctrinal del así llamado Estado Islámico, dando prueba de un profundo conocimiento de esta fuerza terrorista, según la opinión de sus visitantes.
Sobre la base de este conocimiento, Su Eminencia predijo una confrontación entre los kurdos y el EI en Iraq puesto que, según él, el EI buscará una apertura para poder respirar dado que su ofensiva en Iraq ha sido frenada y no puede acceder ya a más extensiones del territorio situado más al sur en el país dado que los iraquíes han absorbido el “primer shock” provocado por la caída de Mosul. El EI ha escogido, pues, para su expansión el territorio kurdo.
Según Sayyed Nasralá, el EI no dispone de un ambiente propicio para su expansión en el Líbano y dijo que el proyecto de ese grupo carece de futuro y no es viable a largo plazo, incluso aunque precise un cierto tiempo para derrumbarse.
Su Eminencia estima que la experiencia y los hechos demuestran que el EI no puede construir un estado en Iraq puesto que los sunníes de ese país se niegan a ser gobernados o controlados por una organización extranjera.
Por otro lado, Sayyed Nasralá manifestó estar profundamente turbado por la expulsión de los cristianos de Mosul y expresó su simpatía hacia ellos, subrayando que la cuestión de su presencia en Oriente Medio resulta fundamental para él.
Él señaló que había seguido personalmente la situación de los cristianos en Siria e insistió en su retorno a sus ciudades natales y dijo que les proporcionaría toda la asistencia posible a este respecto.
Él también indicó que esta cuestión ha provocado un cambio en la mentalidad de los cristianos, en particular dentro de la coalición del 14 de Marzo hasta el punto de situar a los dirigentes de este último en una situación embarazosa.
En lo que respecta a la cuestión de la elección presidencial, Su Eminencia reiteró su apoyo a la candidatura del general Michel Aún y dijo que él está determinado a apoyarle hasta el fin. Esto le fue transmitido al líder druso, Walid Yumblatt, durante su último encuentro.