Unos 600 militantes y personas buscadas por las autoridades de Siria depusieron sus armas en las últimas horas y se entregaron a las fuerzas gubernamentales en la sureña provincia de Deraa.

Unos 600 militantes y personas buscadas por las autoridades de Siria depusieron sus armas en las últimas horas y se entregaron a las fuerzas gubernamentales en la sureña provincia de Deraa.

De acuerdo con fuentes de la gobernación de la provincia, esos ciudadanos fueron amnistiados (según el Decreto Ley vigente al respecto) tras comprometerse a no cometer ningún acto que vaya en contra de los intereses de Siria y de sus habitantes.

En un comunicado leído a ellos enviado, el Muftí de la República Árabe Siria, Ahmad Badreddine Hassun, máxima autoridad religiosa musulmana sunní del país, les pidió estar listos para defender a su patria, rechazar la violencia y seguir los verdaderos principios de las religiones, alejadas de la interpretación erróneas del Islam.

Badreddine Hassun destacó en su misiva el importante papel desempeñado por los padres, las madres y las autoridades para “hacer volver a sus hijos a la razón” y trabajar en pos de la tolerancia y la reconciliación nacional.

El yihad, enfatizó el Muftí, donde debe estar es en Palestina y el Golán sirio ocupado (por Israel).

Por su parte, el gobernador de Deraa, Mohammad Jaled Hannus, resaltó ante los cientos de amnistiados el papel de los efectivos del Ejército Árabe Siria en derrotar todos los planes de los terroristas encaminados a socavar el orden y la seguridad en la provincia.

Las Fuerzas Armadas, concluyó, continúan sin tregua su lucha para estabilizar, asegurar y posibilitar la recuperación de Siria.

Según fuentes sirias, los rendidos pertenecían a grupos tales como el Consejo Local de la Ciudad de Deraa, la Brigada los Mártires del Islam, la Brigada Miqdad y la Brigada Saad bin Abi Waqas. Según el acuerdo, primero se produjo un cese el fuego y luego los militantes entregaron sus armas. Ellos podrán participar en la gestión de los asuntos de su región y se producirá el retorno a los desplazados. Los combatientes extranjeros serán expulsados de la ciudad.

Cabe mencionar que el acuerdo de Deraa significa un notable éxito para los militares que pone en sus manos el 80% de las áreas de combate en esta provincia fronteriza con Jordania. Estos acuerdos podrían también extenderse a otras poblaciones e ir poniendo fin a la lucha en sectores enteros del país.