No cabe duda de que una de las razones de la agresión israelí contra Gaza es el intento israelí de romper por todos los medios posibles el acuerdo sobre un gobierno nacional palestino.
No cabe duda de que una de las razones de la agresión israelí contra Gaza es el intento israelí de romper por todos los medios posibles el acuerdo sobre un gobierno nacional palestino. Tras el fracaso de esta agresión en lograr su objetivo, es decir, sabotear el proceso de reconciliación, ha sido el turno de la Inteligencia israelí de sembrar las semillas de la sedición.
Recientemente, el gobierno israelí anunció el arresto de 93 activistas del movimiento de resistencia palestina Hamas en Cisjordania el pasado mayo y afirmó que ellos estaban planeando “un golpe de estado” contra la Autoridad Palestina. Ofir Gendelman, portavoz del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, dijo en un tuit en su cuenta de Twitter que los 93 miembros de Hamas “planeaban un golpe contra la Autoridad Palestina y la toma de Cisjordania y lanzar luego ataques terroristas contra Israel”.
Él afirmó que el Servicio de Seguridad Interna, Shin Bet, había confiscado seis pistolas, un rifle M-16, siete lanzagranadas y grandes cantidades de munición así como una cantidad de 6.000 shekels (unos 1.700 dólares) y un vehículo en la localidad de Uya, cerca de Jericó, y afirmó que todo esto eran “evidencias” del complot.
Él dijo que el líder de Hamas, Jalid Meshaal, y uno de los líderes de Hamas que reside en Turquía, Saleh Alaruri, estaban al corriente del plan.
Algunos dirigentes israelíes han pedido al asesinato de Meshaal y el envío de un comando del Mossad a Doha, la capital de Qatar, donde él vive. En este sentido, la existencia de esta “célula” sería un pretexto para la liquidación de los dirigentes palestinos. El propio Netanyahu era primer ministro hace 15 años, cuando una célula del Mossad trató sin éxito de asesinar a Meshaal en Ammán, Jordania.
El “descubrimiento” de esta célula en el corazón de la AP en Ramalá es un hecho a todas luces ridículo. Nadie puede creer que este grupo pretendiera “tomar Cisjordania” con seis pistolas, un rifle y siete lanzagranadas. Además, si estas personas fueron detenidas en mayo, ¿por qué se ha dado a conocer el arresto tres meses después durante la agresión israelí contra la Franja de Gaza y cuando los palestinos habían formado una delegación única para negociar un cese el fuego duradero en las conversaciones de El Cairo?
Israel ya no es sólo un estado paria por la agresión contra Gaza sino por las continuas provocaciones, atentados de falsa bandera, la fabricación de historias en los medios y la guerra sucia. La historia sobre la inexistente conspiración para derrocar a la AP es sólo un nuevo intento más para romper la unidad palestina que fracasará, a todas luces, como los anteriores.