Muchas de las armas que utiliza el grupo terrorista son proporcionadas por la CIA, o indirectamente por la CIA a través de Arabia Saudita.
El periodista de investigación estadounidense Dave Lindorff aseguró hoy que los integrantes del autoproclamado Estado Islámico (EI) emplean armas facilitadas por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) a los denominados rebeldes sirios.
Muchas de las armas que utiliza el grupo terrorista son proporcionadas por la CIA, o indirectamente por la CIA a través de Arabia Saudita, subrayó el reportero durante una entrevista transmitida por la emisora Press TV.
Supongo que es un viejo juego de Washington el proporcionar armas a ambos lados. Así, nosotros vamos y venimos mientras muere la gente, sostuvo el periodista de investigación.
A juicio de Lindorff, el gobierno del presidente Barack Obama debe explicar a la ciudadanía estadounidense "por qué las personas que antes fueron apoyadas por nosotros -los supuestos rebeldes moderados en Siria- ahora son nuestros enemigos mortales".
El presidente Obama analiza la posibilidad de golpes aéreos contra posiciones de los yihadistas en territorio sirio, al igual que en Iraq, si bien el gobierno de Damasco demandó coordinar tales incursiones que pudieran ser consideras un acto de agresión y contrarias al principio de soberanía.
Tal posibilidad, a juicio de analistas, constituye un paso significativo hacia una acción militar directa de Estados Unidos contra Siria, intervención que alteraría la situación en el campo de batalla de la contienda que tiene lugar en la nación levantina desde hace tres años.
Desde que inició el conflicto en marzo de 2011, Estados Unidos y naciones aliadas optaron abiertamente por respaldar a las bandas opositoras que persisten en derrocar por la fuerza al presidente Bashar al-Assad.
Aunque Obama reconoció recientemente el peligro de la expansión del fundamentalismo islámico en la región, al mismo tiempo sigue apostando por concretar el denominado cambio de régimen en Damasco.
Para ello solicitó unos 500 millones de dólares a fin de entrenar y equipar a grupos opositores, plan que sigue sin concretarse debido a la falta de aprobación del presupuesto militar para 2015 en el Congreso.
La Casa Blanca adujo días atrás que trabaja en la propuesta para alistar en 18 meses unos dos mil 500 efectivos, en un país aún por determinar; si el paquete es aprobado complementaría el programa encubierto que agencias de inteligencia norteamericanas realizan con el propósito de derrocar a al-Assad.
Washington ha desembolsado unos 287 millones de dólares para respaldar a dichos grupos, reconocen cifras oficiales.
A fines de enero el Congreso estadounidense aprobó en secreto el envío de armas y ayuda financiera a las bandas armadas en Siria, con un presupuesto que vence el venidero 30 de septiembre.
La asistencia incluyó varios tipos de cohetes antitanques, municiones de infantería y otros abastecimientos indispensables para las acciones de los llamados "sectores moderados" dentro de los grupos subversivos del país árabe.
PL