01-11-2024 09:32 PM Tiempo de Jerusalén

Senador de EEUU denuncia encubrimiento del papel saudí en el 11-S

Senador de EEUU denuncia encubrimiento del papel saudí en el 11-S

La negativa de EEUU a investigar la conexión de Arabia Saudí con los atentados del 11 de Septiembre de 2001 es uno de los factores que llevó al crecimiento del grupo terrorista Estado Islámico.

La negativa de EEUU a investigar la conexión de Arabia Saudí con los atentados del 11 de Septiembre de 2001 es uno de los factores que llevó al crecimiento del grupo terrorista Estado Islámico. Esto es lo que Bob Graham, un antiguo senador y copresidente de la comisión de investigación oficial sobre el 11 de Septiembre, dijo al diario The Independent en una entrevista.

Graham expresó sus dudas sobre la confianza otorgada por EEUU a Arabia Saudí en su papel de aliado en la lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI). A principios de esta semana, el presidente de EEUU, Barack Obama, anunció un plan, según el cual, Arabia Saudí suministrará entrenamiento y armas a rebeldes sirios “moderados”, de los que se espera que luchen a la vez contra el EI y el gobierno sirio.

El antiguo senador fue muy crítico con la decisión de Obama de colaborar con Arabia Saudí, un país que ha sido acusado de patrocinar “a los elementos sunníes más extremistas”.

Graham dijo que EEUU tiene una larga historia de hacer la vista gorda hacia las actividades de su aliado saudí. Graham, que ha estado en el Senado durante 18 años y encabezó el Comité de Inteligencia durante más de un año tras los atentados del 11-S, ha cuestionado la forma en la que el gobierno de EEUU trató a los saudíes después del atentado contra las Torres Gemelas.

A pesar del hecho de que 15 de los 19 presuntos autores de aquel hecho eran saudíes, él dijo que 144 de sus compatriotas, en su mayor parte miembros de la familia real saudí, fueron capaces de volver a Arabia Saudí a los pocos días de los atentados sin ser interrogados por el FBI.

“Hubo algunos incidentes en los que los responsables estadounidenses fueron inexplicablemente obsequiosos con los saudíes”, dijo el senador Graham. “Creo que este fracaso a la hora de poner de manifiesto las acciones saudíes y más concretamente su implicación en los atentados del 11-S contribuyó a que Arabia Saudí continuara llevando a cabo acciones que han dañado a EEUU, y en particular su apoyo al EI”, afirmó.

“Los aliados de EEUU cultivaron al Estado Islámico y ahora el EI planea izar su bandera sobre la Casa Blanca”.

Varias informaciones sobre el papel saudí en los atentados del 11-S están recogidas en un informe de 28 páginas que no ha sido hecho público. Graham ha estado abogando por su publicación.

Obama prometió sacar a la luz estos documentos censurados durante su primera campaña presidencial, pero no ha cumplido su promesa.

Graham habló también los vínculos personales de la familia Bush y los dirigentes saudíes. Sin embargo, la razón por la que “la política de encubrimiento del papel de Arabia Saudí en el 11-S persiste hasta hoy en día, bajo la Administración Obama”, es algo que él no logra entender.