El grupo Estado Islámico está a punto de perder la totalidad de la provincia de Deir Ezzor, que tiene una gran importancia para su supervivencia.

El grupo Estado Islámico está a punto de perder la totalidad de la provincia de Deir Ezzor, que tiene una gran importancia para su supervivencia. La causa de la retirada de la provincia reside en los ataques del Ejército y la aviación siria, que han causado graves pérdidas al grupo.

En los últimos días, la fuerza áerea siria intensificó sus ataques contra posiciones del EI, caracterizados por "una precisión muy alta”.

Además, el EI ha sufrido numerosas pérdidas en los últimos días durante sus ataques contra el aeropuerto militar de Deir Ezzor, en el Este del país. Estos ataques han sido rechazados por el Ejército sirio.

El EI evacuó la localidad de Abukumal, en la frontera sirio-iraquí, ante el incremento de los ataques contra sus fuerzas, en especial por parte de la tribu Al Shatat.

En la capital de la provincia, donde el EI controla algunas partes, los combatientes del grupo se hallan asediados.

Las fuerzas especiales sirias volaron el lunes el puente de Assiyassa, que era la única vía terrestre de la que disponía el EI para reabastecer a sus combatientes en la ciudad de Deir Ezzor. En este momento, el solo medio para enviar suministros a los mismos es a través del Río Eúfrates.

La voladura del puente fue llevada a cabo por comandos en una operación especial. Ellos estuvieron acompañados por una unidad de ingenieros. Los comandos mataron a todos los milicianos que encontraron a su paso.

Evacuación

Según fuentes citadas por el periódico libanés Al Akhbar, el EI se dispone ahora, ante tales reveses, a evacuar sus posiciones en Deir Ezzor.

Los habitantes de la provincia dicen haber visto convoyes de tanques del EI dirigirse hacia Iraq. En los sitios sociales se señala que la mayor parte de las milicias que habían prestado juramento de lealtad al EI han comenzado a salir de la ciudad.

Los residentes han sido amenazados por el EI para que no abandonen Deir Ezzor en lo que parece ser un intento del EI de querer utilizarlos como escudos humanos en caso de ataques aéreos.