Altos representantes de la comunidad de inteligencia estadounidense han mostrado su escepticismo sobre la efectividad del plan del presidente Barack Obama.

Altos representantes de la comunidad de inteligencia estadounidense han mostrado su escepticismo sobre la efectividad del plan del presidente Barack Obama para armar a lo que él denomina como “rebeldes moderados” en Siria, según señala la publicación Huffington Post. Esta última afirma que existe dentro de la CIA y el Departmento de Defensa una oposición al plan.

La oposición deriva de un buen número de factores. En primer lugar, la CIA ya ha estado armando de forma encubierta a los rebeldes sirios o “terroristas moderados”, siguiendo las instrucciones de la Casa Blanca. Sin embargo, este plan ha resultado un fracaso debido a que los rebeldes se muestran cada vez más desorganizados y radicalizados según progresa el conflicto en Siria y a que las armas norteamericanas acabaron en las manos de los grupos más extremistas.

Un congresista demócrata dijo a Huffington Post, bajo la cobertura del anonimato, que la CIA le había dejado claro que duda de la posibilidad de que la estrategia de la administración pueda tener éxito. “La CIA considera que este esfuerzo está condenado al fracaso”, dijo el congresista.  “La CIA cree que es imposible entrenar y equipar a una fuerza de sirios pro-occidentales que pueda luchar y derrotar a Assad, al Frente al Nusra y al EI”, señaló.

Él añadió que, en opinión de la CIA, el nuevo plan de Obama es un extensión de una estrategia que no funciona.  “La CIA cree que su anterior encargo de llevar a cabo esta tarea fue una “misión imposible” y es bien consciente de que muchas de las armas que entregó a los rebeldes acabaron en las malas manos”.

La CIA ha estado entrenando a miembros del Ejército Sirio Libre en bases encubiertas en Jordania, dijo el Washington Post el pasado año. Esta operación acabó convirtiéndose en un secreto a voces. Ahora, la tarea pasará al Departamento de Defensa, que expandirá la operación de entrenamiento a unos 5.000 rebeldes en Arabia Saudí, señaló el Huffington Post.