El movimiento de resistencia libanés Hezbolá agradeció el domingo el permanente respaldo de Irán a su causa y el donativo de armas prometido al Ejército libanés.
El movimiento de resistencia libanés Hezbolá agradeció el domingo el permanente respaldo de Irán a su causa y el donativo de armas prometido al Ejército libanés para enfrentar la amenaza de grupos terroristas.
De acuerdo con el jefe del Comité Ejecutivo de la agrupación líder de la resistencia libanesa, Sayyed Hashem Safieddin, la asistencia iraní a las Fuerzas Armadas llega en el justo momento porque combate contra los terroristas en la actual coyuntura que definió como sensible.
"La República Islámica, una vez más, en la práctica probó su sinceridad con El Líbano al apoyar al ejército del país árabe en las más difíciles y cruciales condiciones", apuntó Safieddin mientras se reportaban combates en la periferia de Arsal entre fuerzas gubernamentales e islamistas.
El 30 de septiembre, el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, Ali Shamjani, visitó este país y anunció la disposición de proveer todo el equipamiento militar necesario para que las Fuerzas Armadas sean capaces de combatir al terrorismo yihadista.
Durante un sermón por el Eid Al-Adha en la Mezquita Ali Ibn Abi Taleb de Baalbek, el clérigo Muhammad Yazbek, representante especial en El Líbano del Líder Supremo iraní, ayatolah Ali Khamenei, consideró hoy que la aceptación del armamento ofrecido por Teherán ayudará a liberar a militares rehenes.
El religioso se refirió a una veintena de soldados y policías capturados por milicianos extremistas sirios a comienzos de agosto durante los combates en la aldea libanesa de Arsal, en el valle de la Bekaa noreste limítrofe con Siria, y que están en paradero desconocido desde entonces.
Parientes de un soldado retenido volvieron a bloquear este domingo la carretera Barka-Aynata como parte de las protestas ya sistemáticas para presionar al gobierno a que acelere su liberación, sobre todo después de la muerte de tres uniformados, dos de ellos decapitados.
Insurgentes del Frente al Nusra y el Estado Islámico exigen a Beirut canjear a los militares por extremistas presos en la cárcel de Roumieh, pero el Ejecutivo fue facultado sólo a negociar, sin aceptar al intercambio.
Al respecto, Yazbek subrayó que la real liberación sólo puede llegar con la excarcelación de todos los militares en manos de los takfiris y el regreso de Arsal al "redil del país".
Igualmente, reiteró el llamado a permanecer alertas frente al "sionismo (Israel) y los takfiris que están al servicio de los sionistas en un intento común por fragmentar a la región".
El vicejefe del Consejo Superior Islámico Shií, Sheij Abdel Amir Qabalan, urgió a los libaneses a apoyar a las Fuerzas Armadas, mientras el diputado Farid el Jazen advirtió que el canje de prisioneros puede alentar a los terroristas a adoptar medios ilegítimos para conseguir sus objetivos.