Los medios israelíes han subrayado que “Hezbolá quiere mostrar que es una amenaza permanente para Israel”.
Los medios israelíes han subrayado que “Hezbolá quiere mostrar que es una amenaza permanente para Israel” y han dejado entrever también su temor a que se produzca un equívoco que lleve a un incremento de las tensiones o a un conflicto abierto en la frontera norte.
Anshel Pfeffer, editorialista del periódico Haaretz, citado por i24, cree que la explosión en la frontera “no ha sido una sorpresa”. Lo que puede sorprender, señaló, “es que Hezbolá haya reivindicado inmediatamente este ataque”.
“Parece que esta acción fue preparada con el fin de ocasionar daños humanos relativamente moderados, pero no suficientes para generar un conflicto de envergadura” y señaló que “Israel no tiene ningún deseo de implicarse de nuevo en una gran operación militar cuando ha transcurrido tan poco tiempo desde a que llevó a cabo en la Franja de Gaza. Al mismo tiempo, la operación ha servido para recordar al pueblo libanés y al mundo árabe que Hezbolá continúa siendo la principal fuerza de resistencia”.
Amos Harel escribió en el mismo medio, Haaretz: “Los últimos incidentes muestran que Hezbolá representa una amenaza que debe ser tomada en serio. La organización trabaja constantemente para restablecer su poder de disuasión frente a Israel.”
Ron Ben-Yishai, editorialista de Yediot Aharonot, dijo que Hezbolá ha querido mostrar a los israelíes que “no está demasiado ocupado” en otros frentes, en Siria, Líbano e Iraq, como para bajar la guardia frente a la entidad sionista.
“Hezbolá buscó mostrar a Israel y al pueblo libanés que el frente israelí no está dormido y continúa ocupando un lugar central en sus preocupaciones”, precisó el editorialista. “Esto es por lo que el lugar escogido fue Har Dov, una zona utilizada por Hezbolá para recoger información y hacer ostentación de su poder. Hezbolá no perdona ni olvida su combate contra Israel”, escribió el periodista.
Avi Issacharoff escribió en The Times of Israel que Hezbolá ha enviado un mensaje claro: “Cada vez que sean heridos libaneses por el Ejército israelí, él va a responder a lo largo de las fronteras libanesa y siria”. Para el editorialista, la explosión del martes buscó también vengar la muerte de Ali Hassan Haidar, un miembro de la resistencia caído mártir el 5 de Septiembre cuando intentaba desactivar un ingenio explosivo vinculado a un aparato de espionaje israelí en la localidad de Adlun, en el sur del Líbano.