Cientos de miles de sirios se manifestaron este miércoles en el centro de Damasco para expresar su apoyo al presidente Bashar el Assad.
Cientos de miles de sirios se manifestaron este miércoles en el centro de Damasco para expresar su apoyo al presidente Bashar el Assad, cuyo régimen se enfrenta a una campaña interior, apoyada por algunos estados árabes y las potencias occidentales, con el fin de derrocarlo.
Mientras que algunas agencias occidentales intentaron mininizar la magnitud de la manifestación, hablando de “miles” de personas, las imágenes mostraron a una gran multitud que llenaba la Plaza de los Siete Mares y las arterias que dan a ella.
Según los observadores, esta manifestación es claramente mayor que la que tuvo lugar el pasado mes de agosto.
Fueron internautas sirios, partidarios del presidente, quienes invitaron a sus compatriotas a participar en la manifestación en su página de Facebook llamada “mi país, Siria.” El objetivo es “fortalecer la unidad y la solidaridad con las familias de los mártires y dar las gracias a Rusia y China por su posición en la conspiración” contra Siria.
El 4 de octubre, Rusia y China -dos miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU- vetaron un proyecto de resolución occidental que amenazaba a Siria con “medidas específicas”.
La manifestación también tenía como objetivo “exponer” al Consejo Nacional de Siria (SNC), un organismo apoyado por Occidente y Turquía, que agrupa a varias corrientes de oposición al presidente sirio y fue creado oficialmente el 2 de octubre en Estambul.
“Somos tus hombres”, “La gente quiere a Bashar ElAssad", “Dios, Siria y Bashar solamente”, gritaban los manifestantes.
“El Ejército y el pueblo están contigo, Bashar al-Assad” o “Siria es nuestro país y Assad es nuestro presidente”, proclamaban los carteles de los manifestantes en la plaza junto a un retrato gigante del presidente.
Interrogado por la United Press Internatioal (UPI), el presidente del sindicato de periodistas sirios, Elias Murad, dijo: “La gente quería expresar hoy su rechazo a toda forma de injerencia exterior y el apoyo a las reformas iniciadas y que están empezando a ser aplicadas”.
El estudiante de secundaria Ibrahim, que blandía como sus compañeros banderas de Siria, Rusia y China, dijo a la agencia estadounidense: “Salimos después de finalizar la clase para dar las gracias a China y Rusia, que han adoptado una posición en favor de nuestro país y quieren evitar su destrucción.”
Miles de participantes ondeaban banderas sirias y retratos del presidente sirio y pancartas en las que estaban escritas en árabe, ruso e inglés palabras de agradecimiento a Moscú y Pekín.
Un joven de Damasco que participó en la marca, Ali, hizo hincapié en que había acudido a la manifestación “por lealtad a la patria y al presidente, en contra de las amenazas extranjeras, en solidaridad con el derecho de Siria, y en contra de los actos de violencia y los ataques perpetrados contra ciudadanos sirios”.
Según él, “tanto las autoridades como la oposición deben hacer concesiones para llegar a un acuerdo que salvaguarde la seguridad y la estabilidad del país. Si nos quedamos en el marco de las acusaciones y contraacusaciones, creo que nuestro país no estará en una buena situación”.