Los rebeldes huthis shiíes de Yemen, que dominan una gran parte del noroeste del país, incluyendo la capital Sanaa, han estado expandiendo su control hacia el sur, a lo largo de la costa del Mar Rojo.

Los rebeldes huthis shiíes de Yemen, que dominan una gran parte del noroeste del país, incluyendo la capital Sanaa, han estado expandiendo su control hacia el sur, a lo largo de la costa del Mar Rojo. Ellos se están moviendo ahora hacia el interior.

Los enfrentamientos entre los huthis y Al Qaida han continuado desde que los primeros tomaron Sanaa. El domingo, los huthis tomaron la localidad de Manasih, en la provincia de Baida, uno de los principales bastiones de Al Qaida en Yemen, expulsando de ella a los combatientes de Al Qaida en la Península Arábiga y a las facciones tribales que luchan a su lado.

Uno de los líderes de estas fuerzas tribales señaló que los huthis tomaron la localidad apoyados por tanques y misiles, señaló uno de los jefes de dichas fuerzas, Ahmed al Sarimah, a Bloomberg News.

Los huthis tomaron también la ciudad de Radda la pasada semana tras un enfrentamiento con fuerzas tribales próximas a Al Qaida.

Los huthis se benefician del apoyo del Ejército yemení que ha estado lanzando ataques aéreos y de artillería contra los grupos terroristas en la región y espera utilizar el avance de los huthis con el fin de debilitar a Al Qaida.

Los huthis han apoyado el nombramiento del nuevo primer ministro en el país y formarán una parte significativa de cualquier futuro gobierno.

Los huthis, que reciben este nombre de Hussein al Huthi, el fundador del grupo, luchan para poner fin a la discriminación histórica que han sufrido los shiíes por parte de las autoridades.