Un general del Ejército israelí dijo el miércoles que la entidad sionista cree que Hezbolá ha excavado probablemente túneles por debajo de la frontera en preparación para cualquier futura guerra.
Un general del Ejército israelí dijo el miércoles que la entidad sionista cree que Hezbolá ha excavado probablemente túneles por debajo de la frontera en preparación para cualquier futura guerra, pero afirmó que no dispone de evidencias concretas de ese hecho.
“No tenemos información que nos permita afirmar que hay túneles. La situación no es similar a la que existía en la Franja de Gaza”, dijo el mayor general Yair Golan, comandante de las fuerzas israelíes en los frentes libanés y sirio, a la Radio del Ejército israelí.
“Dicho esto, esta idea de construir por debajo del suelo no es extraña al Líbano ni a Hezbolá así que tenemos que suponer, como premisa de trabajo, que hay túneles”, afirmó.
La vulnerabilidad de Israel ante los túneles se puso de manifiesto durante su guerra contra el movimiento de resistencia palestino Hamas en Gaza en julio y agosto. Lo que comenzó como intercambios de obuses entre Hamas y el Yihad Islámico, por un lado, y el Ejército israelí, por otro, acabó dando lugar a una escalada e Israel trató infructuosamente de destruir los túneles subterráneos que discurrían desde Gaza hacia los territorios palestinos ocupados y por los que los combatientes de Hamas lanzaron ataques sorpresa.
Las localidades del norte de Israel fueron atacadas con cohetes y misiles durante la Guerra de Julio de 2006 y los colonos residentes han informado períódicamente de la existencia de ruidos subterráneos que sugieren que la Resistencia libanesa estaría llevando a cabo excavaciones por debajo de la frontera.
Por su parte, el Ejército israelí ha llevado a cabo búsquedas pero no ha encontrado nada.
Golan cree que Hezbolá no tiene interés aparentemente en buscar un nuevo conflicto con Israel.
Él dijo que “nosotros y Hezbolá hemos logrado un tipo de equilibrio de disuasión mutua”, aunque señaló que algunos incidentes aislados en la frontera podrían arrastrar a ambas partes a una guerra. “Cada lado tiene su línea roja que, si se cruza, le llevaría a emprender una acción”, afirmó.