Turquía puso en duda el viernes las acusaciones estadounidenses de que supuestos agentes iraníes conspiraron para matar al embajador saudí en Washington.
Turquía, un miembro de la OTAN y aliado de EEUU, puso en duda el viernes las acusaciones estadounidenses de que supuestos agentes iraníes conspiraron para matar al embajador saudí en Washington, diciendo que no creen que Irán estuviera implicado en este acto.
“No creemos que Irán esté implicado en este acto, aunque EEUU dice que tiene pruebas”, dijo Ahmet Davutoglu, el ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, en una conferencia de prensa conjunta con su homólogo iraní, Ali Akbar Salehi, de visita en Turquía.
“Los gobiernos deben ser transparentes en estas cuestiones. Los que hacen las alegaciones también deben ser claros acerca de sus demandas e Irán debe responder acerca de ellas”, dijo Davutoglu.
Teherán ha negado las acusaciones afirmando que son parte de una campaña de desprestigio contra Irán. Salehi dijo que era una “pérdida de tiempo” hablar sobre las acusaciones.
El asunto ha agravado las tensiones entre Estados Unidos e Irán. Ambos países no han tenido relaciones desde el año 1979 durante la Revolución Islámica de Irán y el ambiente se ha envenenado aún más por las preocupaciones de Occidente sobre el programa nuclear de Irán.
Davutoglu pidió a los Estados Unidos e Irán que resuelvan sus diferencias de forma constructiva. “Lo que hay que hacer ahora es que todas las partes involucradas compartan lo que tienen y dejen claro el tema sin dar lugar a un nuevo aumento de las tensiones. Turquía está dispuesta a contribuir, si hay algo que podamos hacer, para ayudar a aliviar la tensión.”
Zaman