25-11-2024 08:21 AM Tiempo de Jerusalén

Gobierno saudí construirá palacio real en el lugar de nacimiento del Profeta

Gobierno saudí construirá palacio real en el lugar de nacimiento del Profeta

El lugar de nacimiento del Profeta Muhammad (PB) en la ciudad santa de Meca está a punto de ser “enterrado” y en su lugar se levantará un inmenso palacio real.

El lugar de nacimiento del Profeta Muhammad (PB) en la ciudad santa de Meca está a punto de ser “enterrado” y en su lugar se levantará un inmenso palacio real, señaló un artículo publicado el jueves pasado por el periódico británico The Independent.

Este nuevo proyecto de destrucción forma parte de un plan de expansión del Masyid al Haram, o la Gran Mezquita, que ha costado miles de millones de dólares, y llevará a la destrucción de centenares de monumentos histótricos en la ciudad santa.

Las autoridades encargadas del plan de expansión han aducido, como pretexto, el alargamiento de la Gran Mezquita para responder a las necesidades de los millones de peregrinos que visitan cada año Meca para cumplir el ritual de la Peregrinación Mayor o Hayy.

Según el Instituto del Golfo, con sede en Washington, hasta el 95%  de los edificios milenarios de Meca han sido destruidos y reemplazados por hoteles de lujo, apartamentos y centros comerciales.

Hace dos semanas, las columnas otomanas que se remontaban a más de 500 años y que conmemoraban la ascensión del Profeta (PB) al cielo fueron igualmente destruidas, manifestó el Dr. Irfan Alawi, de la Fundación para la Investigación del Patrimonio Islámico, con sede en Londres, al periódico británico The Independent.

Por su parte, la Casa del Maulid, el lugar de nacimiento del Profeta Muhammad en el año 570, podría ser destruida antes de finales de este año. Ella será reemplazada por un palacio real, donde residirá el rey Abdulá durante sus viajes a Meca.

Estos planes han sido verificados por fuentes independientes, que han criticado con dureza el proceso de construcción, pero son incapaces de hablar en público por miedo al castigo del régimen, prosigue el periódico.

“El último sitio histórico que queda en pie en el reino es la ciudad natal del Profeta Muhammad, probablemente el sitio más importante de la comunidad musulmana en el mundo entero. Lo peor de todo es que la mayor parte de la gente no es ni siquiera consciente de estos planes para su destrucción”, deploró Alawi.

Arabia Saudí promueve el pensamaiento wahabí, fuente de inspiración de los terroristas takfiris, que prohíbe la visita a lugares donde residieron o están enterrados profetas o santos, calificando esta práctica de “shirq” o “idolatría”.

La destrucción de los sitios históricos islámicos ha sido recientemente defendida por el Gran Mufti de Arabia Saudí, Sheij Abdul Aziz bin Abdulá al Sheij, que afirmó que las demoliciones eran “necesarias” y que la nación debería agradecer al gobierno por el trabajo que realiza.

En septiembre, el periódico The Independent reveló igualmente que ni siquiera la la Tumba del Profeta (PB) en la ciudad santa de Medina se halla al abrigo de los wahabíes extremistas.