El partido tunecino ganador de las primeras elecciones en Túnez después de la caída de Ben Ali, An Nahda, se ha comprometido a cerrar la oficina de enlace con Israel, que se inauguró en 1996 durante Ben Ali.
El partido tunecino ganador de las primeras elecciones en Túnez después de la caída de Ben Ali, An Nahda, se ha comprometido a cerrar la oficina de enlace con Israel, que se inauguró en 1996 durante la dictadura de Ben Ali.
“El gobierno que va a formar el partido An Nahda cerrará la oficina de enlace con Israel”, dijo Al Munsel Ben Salem, uno de los dirigentes del partido islamista, dirigido por el líder carismático Rashid al Ganushi.
En declaraciones al diario Az Zaman, Ben Salem añadió que el próximo gobierno derogará todos los acuerdos de normalización concluidos con la entidad sionista y todos los compromisos comerciales y detendrá la importación de mercancías procedentes de Israel.
Sin embargo, el próximo gabinete respetará todos los compromisos contraídos con Occidente.
En cuanto a las elecciones legislativas, Ben Salem dijo que su partido había obtenido 89 escaños en el Parlamento, de un total de 217. “Esta mayoría no nos permitirá formar un gobierno de un solo partido y vamos a aliarnos con el Partido del Congreso por la República, liderado por Marzuki”.
El acuerdo con Marzuki se habría producido incluso si An Nahda hubiera obtenido una mayoría absoluta, añadió.
Marzuki debería ocupar el cargo de presidente de la República, mientras que dos nombres de An Nahda están siendo considerados para el puesto de primer ministro.
En cuanto al líder del partido islamista, Rashid Ganushi, él no ocupará ningún puesto en el gobierno.
Según AFP, los primeros resultados parciales y oficiales anunciados el martes por la Comisión Electoral mostraron que An Nahda iba en cabeza en nueve de los 27 distritos del país, especialmente en la capital económica de Sfax (centro-este).
El partido islamista obtuvo 28 de los 55 escaños en los nueve distritos. Con los 9 escaños obtenidos en el extranjero, cuenta ya con 37 diputados electos en la futura asamblea.
En las nueve circunscripciones donde el recuento fue completado, An Nahda es seguido por el Congreso de la República (CPR, izquierda nacionalista) con 9 escaños, empatado con la lista Petición Popular para la Justicia y el Desarrollo”.
La sorpresa vino de la mano de esta lista, ausente sobre el terreno y liderada por Hechmi Haamdi, un millonario tunecino con sede en Londres, que hizo campaña desde el Reino Unido a través de su canal de televisión por satélite Al Mostakilla.
La Petición Popular ya es objeto de quejas en Francia y Túnez por el incumplimiento de las reglas de campaña, incluyendo el mal uso de los medios de comunicación privados de Haamdi y la opacidad de su financiación.
El partido de izquierda Ettakatul obtuvo 4 escaños y el Partido Democrático Progresista (PDP, centro), 4 escaños.
Dos días después de las elecciones, en las que más de 7 millones de electores fueron llamados a las urnas, los observadores internacionales saludaron la transparencia de los comicios calificándolos de “libres” y “transparentes”, a pesar de algunas “irregularidades menores”.
La Asamblea Constituyente elaborará una nueva Constitución y nombrará a un nuevo ejecutivo hasta las próximas elecciones generales. De aquí hasta entonces, el país será gobernado por las autoridades de transición.