El viceministro ruso de Exteriores, Mijail Bogdanov, llegó a Beirut en una visita oficial durante la cual él se reunió con líderes políticos y visitó el Suburbio del Sur de Beirut.
El viceministro ruso de Exteriores, Mijail Bogdanov, llegó a Beirut en una visita oficial durante la cual él se reunió con líderes políticos y visitó el Suburbio del Sur de Beirut para mantener un encuentro con el liderazgo de Hezbolá.
Durante estos encuentros, Bogdanov manifestó el rechazo de Rusia a la creación de una “zona colchón” en Siria y mostró su apoyo al diálogo del gobierno sirio y la oposición nacional y moderada, sin injerencias externas, para buscar una solución política al conflicto de Siria. También manifestó que Rusia desea una victoria militar del Ejército sirio sobre los grupos terroristas que operan en ese país y continuará suministrando ayuda a Siria con tal fin.
Durante su visita, Bogdanov se reunió con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, y el primer ministro Tammam Salaam. Él discutió también con el ministro de Exteriores libanés, Yibran Bassil, las estrechas relaciones bilaterales entre Rusia y el Líbano.
Alianza con Hezbolá
Durante una previa visita de una delegación de Hezbolá a Moscú, los líderes rusos mostraron su interés en las experiencias de la resistencia, que logró lo que varios países árabes combinados no pudieron: derrotar al Ejército israelí.
Estos encuentros responden al deseo de Rusia de consolidar sus relaciones con las fuerzas activas en la región.
En este contexto, Moscú tiende hacia una alianza con Hezbolá del Líbano, en palabras del propio Mijail Bogdanov, como resultado de su peso político en el Líbano y de sus alianzas en la región, que se entremezclana con las de Rusia cada vez más.
Rusia busca también ampliar sus relaciones en Oriente Medio con el establecimiento de estrechos vínculos con Egipto, Turquía, país con el que mantiene sin embargo importantes diferencias con respecto a Siria, y otros estados de la región.