El ministro de Defensa, Jalid al Obeidi, dijo el jueves que más de 18 millones de peregrinos habían llegado a Kerbala para el Arbaín.
Un ataque mortal con morteros tuvo lugar el viernes cerca de la ciudad iraquí de Kerbala, situada a 70 kms al sur de Bagdad, en un momento en el que millones de peregrinos shiíes se reunían en Kerbala para la festividad del Arbain, en lo que constituyó el mayor evento religioso del mundo realizado hasta la fecha.
“Hubo una persona muerta y cuatro heridas cuanto los ataques con mortero alcanzaron un área del lado oeste de la ciudad” poco después de la medianoche, dijo un coronel de la policía.
“Los obuses cayeron en un área llamada Suk al Basra, a unos siete kilómetros del centro de la ciudad”, señaló, precisando que las víctimas eran residentes y no peregrinos.
Este año se ha producido un récord en el número de fieles shiíes que han llegado a Kerbala desde otras ciudades de Iraq y otros países para celebrar la fiesta del Arbain, que marca el fin de los 40 días de duelo tras el aniversario de la muerte del Imam Hussein, una de las figuras más reverenciadas del Islam shií.
El ministro de Defensa, Jalid al Obeidi, dijo el jueves que más de 18 millones de peregrinos habían llegado a Kerbala para el Arbaín, lo que constituye una participación récord en la que es ya la mayor concentración de fieles en un solo evento religioso en el mundo.
Este año “el número de peregrinos de otros países árabes y extranjeros ha alcanzado los 4,5 millones. Ellos pertenecen a 60 nacionalidades diferentes. El mayor contigente son iraníes”, dijo Obeidi.
Se habla de que más de un millón de iraníes han visitado este año Kerbala, siendo ésta también una cifra récord en la historia de esta festividad. “Es la primera vez en la historia que hemos visto un tráfico fronterizo tan intenso”, dijo el director del puesto fronterizo de Shalamya, general Saddam Abdul Sahib.
Aunque esta festividad incumbe sobre todo a los musulmanes shiíes, ella también atrae a personas de otras religiones de todo el mundo.
Las calles y autopistas en Iraq se llenaron de peregrinos que vestían de negro y se dirigían a Kerbala. Algunos llevaban pósters con la imagen del Imam Hussein.
La fiesta se celebró el 13 de diciembre este año, pero millones de fieles han estado caminando hacia Kerbala desde todo el país y desde el extranjero desde hace días.
“Esta es la mayor concentración de la historia. Es excepcional porque los peregrinos consideran su participación este año como un acto de desafío frente al grupo terrorista EI”, dijo un peregrino, Aqil al Turaiji.
El grupo takfiri, que profesa la ideología wahabí, considera a los shiíes herejes y ha convertido los ataques a los miembros de esta escuela del Islam en uno de sus principales objetivos.
La peregrinación se produce sólo unas semanas después de una gran victoria del Ejército y las milicias shiíes sobre los militantes del EI en Yurf al Sajar, localidad situada entre Kerbala y Bagdad.
“La victoria lograda aquí ha tenido una gran importancia en la marcha” de los peregrinos, señaló el ministro de Comunicación, Hassan al Rashid, el miércoles cuando visitó Yurf al Sajar.
Rashid es también comandante de la Organización Badr, que detenta el Ministerio del Interior en el nuevo gobierno de Iraq y cuya milicia es una de las más grandes del país.
“Todas las áreas que roden Kerbala están a salvo gracias a los esfuerzos que ellos (los combatientes de Badr) han hecho, la sangre que han derramado y los sacrificios que han realizado en coordinación con las fuerzas de seguridad”, señaló.