Una nueva prueba del sistema de defensa antimisil realizada por el ejército sionista ha fracasado.

Una nueva prueba del sistema de defensa antimisil realizada por el ejército sionista ha fracasado.

El misil interceptor de misiles Arrow 3, el más poderoso de Israel, falló su prueba y no logró interceptar un misil que era su objetivo, informó Reuters.

Según fuentes de seguridad citadas por la agencia, “se trata de un revés para el sistema antimisiles israelí que EEUU financia y que está destinado a contrarrestar los misiles iraníes”.

En la base aérea israelí de Palmajim, los técnicos encargados de realizar la prueba no lograron ni siquiera que el misil Arrow-3 enfocara el objetivo, un misil lanzado sobre el Mediterráneo.

“La cuenta atrás se inició, pero no pasó nada. Decidimos, por tanto, no desperdiciar el misil”, señaló una fuente militar israelí.

Esta información de Reuters desmiente el comunicado del Ministerio de Defensa israelí que pretendía que la prueba había “tenido éxito”.

El mes pasado, un Arrow-2 falló también en alcanzar su objetivo.

Este fracaso fue reportado por la revista militar estadounidense Defense Journal.

El “Arrow” forma parte de un sistema de interceptación de misiles desarrollado por el ejército de ocupación israelí y ha sido concebido para interceptar los misiles balísticos de largo alcance de Irán y los misiles de medio y corto alcance de Hezbolá.