El candidato del Partido Nidaa Tunis, Beyi Qaid Essebsi, ha señalado que su país buscará restaurar sus vínculos diplomáticos con los países hermanos y amigos, especialmente Egipto y Siria.

El candidato del Partido Nidaa Tunis, Beyi Qaid Essebsi, ha señalado que su país buscará restaurar sus vínculos diplomáticos con los países hermanos y amigos, especialmente Egipto y Siria, sin llevar a cabo injerencias en sus asuntos internos. Essebsi es favorito en la segunda ronda de las elecciones, que tendrá lugar este mes, tras obtener el 39,46% de los votos en la primera. El actual presidente Mocef Markouzi obtuvo solamente el 33,43% de los sufragios.

En una conferencia de prensa, en la que participaron los partidos que le apoyan, Essebsi dijo: “Estamos determinados a defender la soberanía de nuestro país y nos negamos a interferirnos en los asuntos internos de otros países. Egipto es un país amigo y hermano donde han tenido lugar cambios significativos y Siria está atravesando un período difícil y una disidencia interna debido a las injerencias extranjeras”. Él señaló que debilitar a Siria supone, a su vez, debilitar al mundo árabe y a Palestina”.

Marzouki cortó los vínculos con Damasco bajo presión de Qatar, que le ha apoyado en estos años. Él también adoptó una postura negativa hacia las autoridades actuales de Egipto, lo cual afectó a las relaciones entre ese país y Túnez negativamente.

En lo que respecta a la situación interna, Essebsi realizó un llamamiento a los tunecinos en favor de la unidad nacional, con el fin de “superar este difícil estadio en el país”. Él añadió que “Túnez necesita hoy a todos sus hijos, al igual que ocurrió en el momento de la independencia (del colonialismo francés en 1956) y es necesario superar la crisis política, económica y social que el país arrastra”.

Amenazas del EI

Por su parte, los militantes tunecinos del grupo takfiri EI han enviado por primera vez un mensaje en el que se amenaza específicamente a Túnez.

En un vídeo difundido a cinco días de la segunda ronda de las elecciones presidenciales, los grupos takfiris hicieron un llamamiento al boicot de estos comicios y afirmaron que Túnez es, de ahora en adelante, un país en guerra.

Estos grupos extremistas reivindicaron el asesinato de Chokri Belaid y Mohammed Brahmi en 2013 y amenazan con cometer nuevos asesinatos.

Ellos han llamado también a los tunecinos a llevar a cabo un “yihad” en Túnez, a unirse a los grupos takfiris en Libia y Argelia y a prestar juramento de lealtad al EI.