Brett Mac Bally, un alto funcionario del Departamento de Estado de EEUU, cree que los rebeldes sirios serán incapaces de derrotar al Ejército del presidente Assad ni ahora ni en el futuro.
Brett Mac Bally, un alto funcionario del Departamento de Estado de EEUU y ex embajador en Iraq, ofreció durante una reciente sesión del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de EEUU, una evaluación pesimista, desde su punto de vista, de la situación en Siria y sobre la capacidad de los llamados “rebeldes moderados” de vencer al Ejército del presidente Bashar al Assad.
Él manifestó que los rebeldes sirios apoyados por EEUU no serán capaces de derrocar al presidente Assad ni ahora ni en el futuro a pesar del programa del Pentágono para el entrenamiento y armamento de 5.000 rebeldes al año.
Él dijo que en las pasadas semanas, la situación de los asediados rebeldes en Siria ha ido de mal en peor habiendo perdido el control de territorios en varias áreas críticas de las provincias norteñas de Idlib y Alepo. También se ha producido la extinción de muchos grupos que se han pasado a las organizaciones yihadistas asociadas con Al Qaida y al EI. Otros combatientes de los grupos rebeldes no desean luchar contra el EI, sino sólo contra el gobierno sirio.
A esto hay que añadir el hecho de que la coalición patrocinada por EEUU contra el EI está profundamente dividida. Mientras que Turquía desea socavar al gobierno sirio aprovechando para ello la campaña contra el EI, otros países de Oriente Medio se oponen a fijar el objetivo del cambio de régimen como política oficial de la coalición.
Hace varios meses, Obama anunció el programa de 500 millones de dólares para entrenar y armar a los rebeldes sirios. Este programa, según Mac Bally, sufre dos grandes inconvenientes: el primero es la dificultad de encontrar “combatientes moderados” que acepten morir para satisfacer los intereses de EEUU. El segundo es que ese programa no puede empezar antes de Marzo de 2015. En lo que se refiere a los combatientes que se entrenan en Arabia Saudí, ellos no estarán listos hasta Marzo de 2016.
Sin embargo, cabe señalar que la CIA ha estado ya entrenando a terroristas para su posterior envío a Siria desde hace más de tres años y ellos han cosechado sólo derrotas a manos del Ejército sirio y los grupos más extremistas.
Mac Bally admitió que la Administración Obama no dirige ahora su atención al derrocamiento del presidente Assad, ya que teme que, en caso de derrumbe del Ejército y el Estado sirio, el hueco sería rellenado por los grupos takfiris, como el EI y el Frente al Nusra, que amenazan también a sus aliados en la región. EEUU prefiere ahora dejar en manos de Rusia la búsqueda de una solución política y presiona a los grupos opositores para que reanuden las negociaciones con el Estado sirio con vistas a lograr una solución política, aunque esto ha dividido a la oposición.