Informaciones no confirmadas hablan de la muerte de Waziq Al Batat, comandante en jefe de las Brigadas Yaish al Mujtar, la rama armada de Hezbolá de Iraq.

Informaciones no confirmadas hablan de la muerte de Waziq Al Batat, comandante en jefe de las Brigadas Yaish al Mujtar, la rama armada de Hezbolá de Iraq. Esta información fue revelada el domingo por el sitio info-irak.

Las Brigadas Yaish al Mujtar confrirmaron, por su parte, la muerte de su comandante “en el transcurso de enfrentamientos con los terroristas takfiris en la localidad de Al Azim, al norte de la provincia de Diyala”.

La muerte de Al Batat se produjo después de que el EI sufriera sus peores reveses a manos del Ejército y las milicias iraquíes en las provincias de Diyala y Salahuddin, donde centenares de miembros de la organización han muerto y otros se han retirado, y tras los éxitos militares consecutivos de los pershmergas kurdos en Sinyar y Talafar.

Las posiciones del Hezbolá de Iraq han sido objeto de frecuentes ataques de la coalición contra el EI en lo que algunos han visto como un intento de EEUU y otros países de impedir que las fuerzas populares iraquíes obtengan un rápido triunfo en Iraq.

Yaish al Mujtar dio a conocer su existencia hace dos años y manifestó que su objetivo era “combatir a Al Qaida y los terroristas y a la corrupción”.

Dicha organización reivindicó hace dos años los disparos de cohetes contra el campo Liberty, el bastión de los terroristas anti-iraníes Muyahidines del Pueblo, que mantuvieron su instalación, bajo presión de EEUU, durante la ocupación de Iraq por parte de las tropas norteamericanas. Dicho campo está situado en un lugar cercano a la frontera iraní y desde él se han llevado a cabo ataques terroristas contra el territorio de la República Islámica.

Yaish al Mujtar reivincidó igualmente el disparo de un cohete contra una posición fronteriza saudí en respuesta a las injerencias de Arabia Saudí y su apoyo al terrorismo en la provincia iraquí de Al Anbar en 2013.

Los combatientes de Hezbolá en Iraq contribuyeron a la ruptura del cerco del EI contra una localidad iraquí, Amerli. Hezbolá transportó a 50 de sus combatientes en helicóptero a Amerli y ellos llevaron a cabo una operación coordinada con el Ejército iraquí y otras milicias y con los asesores iraníes de la Fuerza Al Quds. Aquella acción fue exitosa y las fuerzas de Hezbolá rompieron el cerco a la localidad e hicieron huir a los terroristas del EI.

Cuando el Ayatolá Ali Sistani, el clérigo más poderoso de Iraq, pidió al pueblo iraquí que se levantara contra el EI este año, Hezbolá desplegó a decenas de miles de voluntarios y ha llevado a cabo un notable trabajo en los terrenos del planeamiento, la financiación y la logística en esta guerra, s egún manifestó un alto responsable iraquí a Reuters.