El Ejército egipcio reforzó hoy las severas medidas de seguridad en la ciudad de Al Arish, en la península de Sinaí, al noreste del país, para buscar a los autores del atentado contra el gaseoducto ha
El Ejército egipcio reforzó hoy las severas medidas de seguridad en la ciudad de Al Arish, en la península de Sinaí, al noreste del país, para buscar a los autores del atentado contra el gaseoducto hacia Jordania.
Las entradas y salidas de la ciudad, situada dentro de la zona tapón en la que rigen el estado de emergencia y el toque de queda desde octubre pasado, fueron cerradas por fuerzas del Ejército, informó la agencia oficial MENA.
Imágenes de medios locales muestran un boquete en el gaseoducto del cual se elevaba una enorme llamarada, consecuencia del sabotaje, el número 27 de este año.
De inmediato no existen certezas sobre la identidad de los autores de la acción, pero es posible que ella haya sido realizada por Ansar Beit al Maqdis (ABM), el grupo extremista armado que juró lealtad a Estado Islámico (EI), el movimiento que ocupa zonas en Iraq, Siria y Libia y está implantado en Túnez.
La presunción se basa en un comunicado de ABM, que ha pasado a llamarse Wilayat Sinaí, el cual data de noviembre pasado, en el cual anunció represalias contra Jordania por haberse sumado a la coalición de 40 países que combaten a EI, 10 de ellos árabes.
El comunicado señalaba que "In Sha Allah (Si Dios quiere) ni una gota de gas llegará a Jordania hasta que el califa lo permita", en alusión a Abu Bakr al Baghdadi, líder supremo del EI.
Otros posibles sospechosos son los miembros de tribus beduinas asentadas en el Sinaí, la zona más pobre de Egipto, cuyos patriarcas en ocasiones acuden a este medio de presión para obtener concesiones de las autoridades centrales.
PL