Desde la noche del sábado hasta ahora, el pueblo sirio -hombres, mujeres, jóvenes y niños- ha tomado las calles para expresar su ira y su indignación por la decisión de la Liga Árabe de suspende

Desde la noche del sábado hasta ahora, el pueblo sirio -hombres, mujeres, jóvenes y niños- ha tomado las calles para expresar su ira y su indignación por la decisión de la Liga Árabe de suspender la pertenencia de Siria a la organización.

Millones de personas acudieron en la mañana del domingo a algunos grandes emblemáticos de todas las provincias de Siria para denunciar “el servilismo de los países árabes a los deseos de Occidente”.

Las masas se reunieron en las plazas centrales de Damasco, Alepo, Tartus, Latakia, Sueidaa, Hassake, Deraa, Raqqa, Deir Ezzur, Homs, Hama e Idleb para decir que Siria sigue continuará siendo un tema difícil para sus enemigos y sus agentes.

Los manifestantes afirmaron que Siria le dará al mundo una lección sobre cómo construir el país por las manos de sus propios ciudadanos.

Los participantes en las manifestaciones proclamaron también su determinación de hacer frente a las conspiraciones en contra del papel internacional de Siria y continuar siendo los defensores de la patria y su opción de apoyo a la resistencia y rechazo a la política hegemonista de algunas potencias.

Los manifestantes enviaron un mensaje a cualquiera que tenga dudas sobre la capacidad del pueblo sirio para realizar sus ambiciones nacionales lejos de cualquier injerencia extranjera al servicio de la agenda de EEUU e Israel.

En la noche del sábado, sólo horas después del anuncio de la decisión de la Liga Árabe, miles de personas se concentraron frente a la Embajada de Qatar en Damasco y en la Plaza de Mohafazat, llevando pancartas y denunciando la decisión como una grosera injerencia en los asuntos de Siria, que destruye la acción árabe conjunta.

Ellos lamentaron el hecho de que la Liga Árabe haya hecho caso omiso de las manifestaciones multitudinarias habidas recientemente en Siria en apoyo al programa de reformas presentado por el presidente Bashar al Assad, los participantes subrayaron que la decisión supone una prueba de la sumisión de algunos círculos árabes a los planes exteriores.

En Latakia, miles de ciudadanos se reunieron en la Plaza Azzira en la ciudad y en la Plaza de Amara en Yablé para condenar la decisión de la Liga Árabe, que se ha alineado de forma inequívoca al lado del complot norteamericano-sionista contra Siria, dijo SANA.

En Alepo, miles de personas expresaron en la Plaza de Saadallah al-Yabir su rechazo a la decisión de la Liga Árabe.

A su juicio, esta decisión supone una sumisión a los planes estadounidenses, sionistas y europeas en contra de la unidad y la estabilidad de Siria.

En Sweida, miles de personas se concentraron delante del edificio de la Gobernación y denunciaron que la decisión de la Liga era una consecuencia del complot en contra de Siria.

En Tartus, miles de personas se reunieron para condenar la decisión, señalando que la Liga Árabe fue fundada para proteger a los árabes y no para destruirlos.

El Golán sirio ocupado, una imponente marcha tuvo lugar en la Plaza de Maydal Shams, en la que los participantes corearon consignas manifestando su rechazo a la decisión de la Liga Árabe y a cualquier intento de injerencia extranjera en los asuntos internos de la Siria.