Los recientes atentados terroristas en el Sinaí, que han causado la muerte a 30 miembros de las fuerzas de seguridad, podrían tener un fuerte impacto en la economía egipcia.

Los recientes atentados terroristas en el Sinaí, que han causado la muerte a 30 miembros de las fuerzas de seguridad, podrían tener un fuerte impacto en la economía egipcia ya que socavan los esfuerzos del presidente egipcio, Abdul Fattah al Sisi, para atraer a turistas e inversores. El turismo en Egipto registró una pequeña recuperación en 2014, pero aún está en niveles muy bajos con respecto a la época anterior a la Revolución de 2011, que derrocó al ex presidente Hosni Mubarak.

Los atentados fueron los más sangrientos desde que el grupo Ansar al Bait al Maqdis juró lealtad al grupo terrorista Estado Islámico y pasó a llamarse Wilayat Sinai.

El próximo mes de marzo, Egipto celebrará una conferencia de inversores en Sharm al Sheij, donde el gobierno espera atraer miles de millones de dólares para megaproyectos de infraestructuras. Este evento coincidirá con el inicio de la campaña electoral para las elecciones parlamentarias de ese mismo mes.

Según la red de noticias Rassd, el activista político Anas Hassan, ha apuntado a la contradicción del enfoque que Sisi sigue para tratar los incidentes en Egipto, lo cual “idemuestra la confusión del presidente”.

“Sisi está ahora entre dos posturas”, explicó Hassan al Middle East Monitor. “Incidentes de la guerra contra los Hermanos Musulmanes son explotados políticamente y los medios de comunicación son animados a difundirlos. Sin embargo, otros incidentes, como los atentados del Sinaí, que son los mayores de nuestra historia, sufren una censura informativa”.

Medios oficiales egipcios afirman que los atentados han sido planeados para “debilitar” la economía egipcia y tendrán un efecto en la conferencia de Sharm al Sheij.