05-05-2024 12:35 AM Tiempo de Jerusalén

Jordania busca venganza contra el EI

Jordania busca venganza contra el EI

Jordania ha ejecutado a dos presos, incluyendo a la militante iraquí de Al Qaida Sayida al Rishawi, después de prometer una respuesta letal al brutal asesinato del piloto jordano.

Jordania ha ejecutado a dos presos, incluyendo a la militante iraquí de Al Qaida Sayida al Rishawi, después de prometer una respuesta letal al brutal asesinato del piloto jordano que había sido capturado por el EI. Otros tres presos más serán ejecutados, según una declaración del gobierno.

En la madrugada del miércoles, Jordania ejecutó a Rishawi, a la que había ofrecido liberar con el fin de salvar la vida del piloto Muaz al Kasasbeh, y a otro miembro de Al Qaida, Ziad Karbuli. Rishawi fue capturada durante un ataque en 2005 a un hotel de Ammán donde su cinturón de explosivos falló a la hora de detonar. Aquel ataque causó 60 muertos y estuvo orquestado por el grupo Al Qaida en Iraq. Karbuli fue encarcelado por planear varios ataques indiscriminados con bomba.

Las ejecuciones de los dos terroristas fueron realizadas mediante ahorcamiento en la prisión de Suaqa, situada a unos 80 kms al sur de la capital, Ammán.

“La venganza será tan grande como la gran calamidad que ha azotado Jordania”, dijo el portavoz del Ejército, coronel Mamduh al Ameri, en una declaración televisada. “Esto será sólo el principio”, señalaron responsables jordanos que hablaron de otras tres próximas ejecuciones.

Por su parte, el rey Abdulá II interrumpió su visita a EEUU mientras el país decretó tres días de luto por “el mártir y héroe” Al Kasasbeh.

Jordania hace frente a la amenaza del EI, que podría infiltrarse por las fronteras del reino con Siria e Iraq. Se cree que existen células dormidas del grupo en Jordania.

Por su parte, la población jordana ha llevado a cabo protestas en contra del crimen del grupo terrorista EI. Los manifestantes lanzaron gritos como “Maldito seas, Daesh (el acrónimo árabe del EI)”, “Vengaremos la sangre de nuestro hijo”. En la localidad natal del piloto, algunos manifestantes prendieron fuego a un edificio del gobierno local. Los testigos hablan de una atmósfera tensa.

El piloto jordano ejecutado era miembro de un poderoso clan del sur del país, Al Kasasbeh, que reside en el distrito de Karak, al sur del país. Las tribus del lugar constituyen un firme apoyo de la monarquía, pero la captura del piloto ha tensado la relación entre las dos partes, ya que algunos miembros del clan parecen creer que el gobierno no hizo lo suficiente para asegurar la liberación del piloto. Otros miembros del mismo han condenado la participación de Jordania en la campaña contra el EI. “Ésta no es nuestra guerra”, afirmaron.

Habrá que ver ahora, pues, si el reino hachemí incrementa su participación en los ataques de la coalición, como EEUU espera, en venganza por la muerte del piloto o cede ante aquellos que se muestran contrarios a esta implicación.

Otro interrogante es si este crimen llevará al gobierno jordano a establecer lazos de cooperación con sus vecinos sirio e iraquí en la lucha común contra el terrorismo o si Ammán continuará manteniendo su ambigüedad, o en ocasiones su apoyo, con respecto a los grupos armados que actúan en Siria.